Si hay que gobernar con Vox se gobierna

Alicante

Tras el congreso del PP, los analistas políticos andan analizando las idas y vueltas de los dirigentes populares sobre la retirada del cordón sanitario a Vox; sobre si gobernarían con ellos o si se repetirían elecciones en caso de que los de Abascal les exigieran entrar en un hipotético gobierno.

Las dudas las podrían resolver mirando a la Comunitat Valenciana. Somos unos adelantados a los tiempos que pueden venir. Y fijándose en lo que ha sucedido aquí, se darían cuenta de que, si hay que gobernar conjuntamente, se gobierna y si no, la influencia que podrían ejercer desde fuera de ese ejecutivo, incluso, podría ser mayor. Que se lo digan a Mazón, que empezó el mandato creyendo que con "chupársela a uno de Vox" le iba a bastar y ha terminado tragándose todas sus exigencias para aprobar los presupuestos de este año.

Aquí, los de Vox, lejos de esconder que mandan, reconocen que han impuesto su agenda cultural. De hecho, se han atrevido con cuestiones como el valenciano, un terreno resbaladizo en el que el PP se tienta la ropa. Y si no pasa nada, que es mucho decir, porque el ánimo de Mazón es aguantar hasta el 2027, les quedan dos años para seguir apretándole las tuercas a sus socios populares.