La operación económica tras los fichajes de Santamaria, Ugrinic y Danjuma

Valencia

Buena parte del valencianismo se pregunta qué ha ocurrido para que el club haya acelerado tan notablemente la partida de fichajes 25/26 en las últimas horas. Ya son una realidad Baptiste Santamaría y Filip Ugrinic. Danjuma solo está pendiente de oficialidad y todavía falta alguna operación más por concretarse.

El Valencia iniciaba este mercado de verano con los problemas habituales de tesorería: los gastos del ejercicio 25/26 se prevén una temporada más superiores a los ingresos y eso condiciona el acceso a los jugadores de refuerzo.

Para paliar esa problemática, según ha podido saber la Cadena SER, el Valencia -dentro de la operación de reestructuración de deuda corporativa que tiene en marcha- ha obtenido un nuevo préstamo de entre 25 y 30 millones de euros que le permite cubrir ese desequilibrio de partida. La negociación se ha concretado a un tipo de interés de entre el 5% y el 6%.

Cubierto ese déficit de tesorería con la reestructuración negociada, el Valencia ha ganado margen de maniobra en el mercado porque cuenta con los márgenes de las ventas de Yarek y Mosquera.

Tal y como informó la Cadena SER, de la reunión de finales de mayo en Singapur salió un compromiso para poder reinvertir parte de lo que se ingresara en traspasos en nuevos fichajes. Corberán regresó con esa premisa. Ya se han vendido a Yarek y Mosquera y, si sale Almeida, podrá reinvertirse otro porcentaje si Singapur lo autoriza.

El club persigue salir de la espiral negativa de la lucha por la permanencia de las últimas temporadas y de ahí este esfuerzo por conseguir financiación extra