48 horas finales de locura en el mercado del Valencia: oferta de traspaso por Sadiq, negociación por Etta Eyong… y rápida reacción para firmar al ‘Vikingo’ Beltrán

València

Las 48 horas finales del mercado del Valencia para tratar de cerrar un delantero fueron vertiginosas. Hasta llegar a concretar el fichaje de Lucas Beltrán en la tarde de ayer lunes, la entidad valencianista atacó otros dos nombres propios que tenían el consenso de todos los estamentos del club.

El primero de ellos fue Umar Sadiq. Durante todo el verano, la propuesta que el Valencia enviaba a Donosti con los agentes del nigeriano era la de una cesión pagada en la que el club de Mestalla asumía el 100% del salario del futbolista entre septiembre y junio. Se hicieron dos ofrecimientos de loan fee. Primero, uno de 500.000 euros. Después, otro de un millón de euros.

El pasado domingo, viendo que el conjunto donostiarra solo aceptaba una negociación por traspaso, la ejecutiva valencianista logró autorización de Singapur para plantear una compra a Aperribay. La propuesta era de 4 millones. Aperribay se descolgó pidiendo 6. Ayer lunes, ya en las últimas horas de mercado, el equipo txuri-urdin rebajó sus pretensiones a 5 millones, pero el Valencia ya había adelantado mucho la operación para firmar a Lucas Beltrán y no hubo vuelta atrás.

A pesar de que la operación no salió adelante, Sadiq se puso en contacto con el Valencia para agradecer sus tres ofertas en firme para ficharle, dos cedido y una traspasado. Según ha podido saber la Cadena SER, la entidad valencianista meditaba hacerle un contrato de tres años, hasta junio de 2028, la misma duración del compromiso que tiene con la Real Sociedad.

El segundo nombre que tenía consenso en el Valencia y que era una opción prioritaria para Corberán y la dirección deportiva era Etta Eyong. Viendo que no se desbloqueaba la situación de Sadiq, el club de Mestalla planteó la semana pasada al Villarreal una operación de compra del delantero camerunés. El Valencia pretendía hacerse con el 100% de los derechos del jugador y ofrecía al conjunto de La Cerámica un porcentaje importante de una futura venta. Cuando la negociación Valencia-Villarreal avanzaba, el agente de Etta Eyong planteó unos condicionantes de cobro en la comisión del traspaso que en Mestalla no consideraron ajustados a mercado. Y ahí se detuvieron las conversaciones.

La dirección deportiva, que tenía trabajadas diferentes alternativas por si se llegaba a las últimas horas de mercado sin avances en Sadiq ni Etta Eyong, planteó a Corberán la opción de Lucas Beltrán. Un jugador con un perfil diferente al nigeriano, menos talla, más asociativo, menos juego de espaldas, más participación en el juego colectivo, que tiene el OK del cuerpo técnico. La cesión se ha hecho sin opción de compra porque el valor de la misma que pretendía la Fiore es, ahora mismo, inasumible para el Valencia. Firmaron al ‘Vikingo’ Beltrán por 12,6 millones y han tenido propuestas de traspaso que no convencían al jugador superiores a diez millones.

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