Los veterinarios sufren más presión emocional que nunca: "No estamos en la mejor situación"

Valencia

Gonzalo Moreno del Val ha asumido la presidencia de la Organización Colegial Veterinaria. Llega tras presidir el Colegio de Veterinarios de Alicante. Afronta su mandato con el reto de visibilizar la labor de los veterinarios y mejorar las condiciones de un sector marcado por la precariedad y la presión psicológica, tal y como ha asegurado en La Ventana Comunitta Valenciana.

El reconocimiento de la sociedad

A Moreno se le interpela por el reconocimiento que tiene la profesión por parte de la sociedad que suele asociarse solo con el cuidado de mascotas. “La sociedad nos quiere mucho, pero no conoce realmente hasta dónde llegan nuestras competencias”, asegura Moreno del Val. “Se nos encasilla en el cuidado de animales de compañía, pero abarcamos mucho más: desde el trabajo en granjas hasta un papel fundamental en salud pública”, explica. “Somos el grupo profesional más numeroso en los departamentos de inspección alimentaria y, sin embargo, la población apenas lo sabe”.

La salud mental, uno de los grandes problemas

El nuevo presidente pone el foco en la salud mental de los profesionales. El 32% de los veterinarios ha tenido que cogerse una baja por problemas de salud mental. En países como Reino Unido o Estados Unidos, el riesgo de suicidio es entre dos y cuatro veces mayor que la media de la población. "En España, la situación es igualmente mala”, reconoce. “Somos una profesión muy vocacional, con un vínculo emocional muy fuerte con los animales, y eso hace que las decisiones difíciles sean especialmente duras. Hay más presión hacia el profesional y efectivamente, no estamos en la mejor situación".

Moreno del Val denuncia también la precariedad laboral: “La veterinaria es una de las profesiones peor remuneradas. Muchas veces, ese esfuerzo no se ve recompensado en la parte económica. Hay compañeros que, tras años de formación, se ven obligados a emigrar porque aquí las condiciones no son dignas”, lamenta.

Desde la Organización Colegial Veterinaria, explica que ya se están impulsando programas de apoyo psicológico y formación específica: “Hemos puesto en marcha talleres y cursos con psicólogos y otros sanitarios para ayudar a los veterinarios a gestionar situaciones difíciles y el estrés del día a día”, detalla.

Facultades y precariedad

Moreno del Val advierte sobre la sobreoferta de facultades de veterinaria: “España es el país de la Unión Europea que más veterinarios produce. Con la apertura de la de Ontinyent, solo en la Comunitat Valenciana vamos a formar más que en países como Francia. Esto está provocando que muchos compañeros tengan que hacer las maletas e irse fuera”, señala. “Invertimos recursos públicos en formar profesionales que luego acaban trabajando en otros países. Es un problema que debemos abordar”.

El nuevo presidente concluye que su objetivo es “dar visibilidad a la profesión, mejorar la salud mental de los veterinarios y garantizar que la inversión pública en formación revierta en la sociedad española”. Y lanza un mensaje de esperanza: “Tenemos muchos retos por delante, pero confío en que, trabajando juntos, lograremos avanzar y dignificar la profesión veterinaria”.

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