La Ventana Comunitat Valenciana
Sociedad

Francés (UPV): "Mejorar toda la cadena de predicción y alerta es muchísimo más barato que las infraestructuras hidráulicas"

El experto recuerda que "Lo que salva vidas son las alertas y las evacuaciones"

Entrevista a Félix Francés, Catedrático de la UPV, en La Ventana CV

Valencia

Mirando al futuro tras la DANA sin olvidar el pasado, hablamos, en La Ventana Comunitat Valenciana, con uno de los expertos más importantes en la gestión del riesgo de inundaciones: el catedrático de Ingeniería de Caminos, Canales y Puertos de la Universitat Politècnica de València, Félix Francés. Tras la devastadora DANA de octubre de 2024, sus aportaciones están siendo muy necesarias para entender qué falló, qué se puede mejorar y cómo la ciencia y la planificación urbana pueden mitigar daños futuros

Francés ofrece una mirada técnica pero profundamente humana sobre lo ocurrido. Su diagnóstico es claro: hay que mejorar la predicción, la coordinación institucional y la cultura del riesgo. Pero también hay que tomar decisiones difíciles, como revisar el urbanismo y, en algunos casos, realojar a quienes viven en zonas de alto peligro.

Entrevista a Félix Francés en La Ventana CV

Una catástrofe anunciada

"Lo que salva vidas son las alertas y las evacuaciones", afirma Félix Francés, uno de los mayores expertos en gestión del riesgo de inundaciones. La DANA de octubre de 2024, que golpeó con especial virulencia zonas de la provincia de Valencia, ha puesto en evidencia las carencias del sistema de predicción y alerta, así como la falta de coordinación institucional. "Fue una avenida relámpago. No llovía en la zona inundable, lo cual dificultó la reacción. La gente no estaba en alerta", explica Francés. "La predicción meteorológica se deterioró a lo largo del día. Si AEMET incorporara la incertidumbre en sus predicciones, podríamos tomar mejores decisiones. De hecho, cuando hablo de incertidumbre en clase, pongo el ejemplo de las apps de meteorología. Te dicen: “Probabilidad de lluvia del 20% o del 80%”. La decisión es totalmente diferente. Con un 20%, un valenciano puede coger el paraguas; un gallego, quizá no. Con un 80%, un valenciano puede decidir no salir, mientras que un gallego puede coger el paraguas y salir. En función de esa incertidumbre, la decisión cambia".

Y recuerda más situaciones mejorables. "La gestión de la información del 112 también fue claramente mejorable. Es donde más errores hubo. Y los ayuntamientos, con sus planes de emergencia: algunos actuaron esa tarde, otros no hicieron nada. La Universidad Politécnica de Valencia, por ejemplo, sí suspendió las clases al mediodía y la Universitat de València, el día anterior".

Infraestructuras y soluciones naturales

Francés defiende que las infraestructuras no pueden ser la única respuesta. "Las obras de encauzamiento del barranco del Poyo no habrían evitado todas las víctimas. Las infraestructuras están pensadas para reducir daños económicos, no para salvar vidas".

En 2006 se redactó un proyecto que incluía soluciones basadas en la naturaleza: corredores verdes, zonas de sacrificio, reforestaciones y balsas de laminación. "No es cierto que los ingenieros solo pensemos en hormigón. Estas soluciones son eficaces y eficientes, y tienen ventajas adicionales", afirma.

Urbanismo y normativa

Desde 2003, la Comunidad Valenciana cuenta con el Patricova, un plan territorial que condiciona el desarrollo urbanístico en zonas inundables. "Se han rechazado muchas hectáreas y condicionado otras. Pero el problema es que solo afecta al planeamiento aprobado desde 2003. La mayoría de los planes municipales son anteriores".

Francés propone revisar el Patricova y darle efecto retroactivo. "Hay que adaptar la normativa a la tipología de edificación. La adecuación no es tan cara, y puede hacerse aprovechando la reconstrucción actual. No podemos levantar puentes en los mismos sitios sin cambiar el diseño".

El catedrático reconoce que hay zonas donde vivir es un riesgo. "En zonas de flujo preferente hay que actuar con firmeza, pero con cuidado. Las expropiaciones no son generosas, pero en casos extremos hay que reajustar".

Recuerda casos como Ontinyent, donde se realojó a 200-300 personas. "Eso es asumible socialmente. Pero no podemos trasladar municipios enteros como Riola. Hay que encontrar un equilibrio".

Medidas baratas

Y el experto pone el acento en que, si bien, hay que hacer obras hidráulicas, no se puede dejar de lado medidas que no son tan costosas como las infraestructuras, pero que pueden ser muy importantes para reducir el riesgo. "Por ejemplo, mejorar toda la cadena de predicción y alerta. Eso es muchísimo más barato que la infraestructura de la Rambla del Poyo, y beneficia a toda la Confederación del Júcar. Muy económico. La aplicación de la normativa urbanística también es casi gratuita. E intentamos cambiar es la percepción de la avenida catastrófica. Queríamos establecer un nivel de peligrosidad más ligero, pensando no tanto en el urbanismo, sino en la concienciación, en la educación de la población y en la gestión de emergencias. En casi cualquier sitio hay riesgo. Y uno tiene que saberlo. No pasa nada, uno puede vivir en una zona de nivel bajo de riesgo y convivir perfectamente con el río, pero tiene que saber que está en una zona de riesgo".

Nuevas construcciones

Se le interpela al experto sobre la forma en que estamos reconstruyendo. Y asegura que sí estamos haciendo las cosas diferentes en materia de puentes. "En el caso de los puentes, es una lección aprendida. La normativa, hasta el año pasado, sí que establecía que las pilas y los estribos del puente fueran resistentes a una crecida, a un caudal elevado. El problema fundamental es la socavación de la cimentación de las pilas o de los estribos. Si la cimentación es superficial, puede colapsar el puente por fallo estructural. Esa normativa ya existía, pero nadie había reparado en que el tablero también puede sufrir el empuje del agua. Si el nivel del agua llega hasta el tablero, hay una fuerza de empuje que puede ser mayor si arrastra ramas que se acumulen en él. Y eso no estaba previsto en la normativa. Una de las cosas que se va a cambiar en la normativa de puentes es precisamente eso: diseñar los tableros para que sean resistentes, por ejemplo".

Prepararse para lo inevitable

Francés recuerda que aunque todos estemos pensando en medidas para los municipios afectados por la DANA hay que tener una mirada más larga. "Desde 1951 hemos tenido cuatro episodios catastróficos: en 1957, 1982, 1987 y 2024. Esto va a volver a ocurrir. No sabemos dónde, pero sabemos que pasará", advierte. "Como colectividad, no podemos centrarnos solo en las zonas donde llegó esta DANA. Hay que pensar en toda la Comunitat Valenciana. Tenemos que estar preparados para todos los escenarios".

Félix Francés, catedrático de la UPV, concluye con una reflexión que debería marcar la agenda política: "Tenemos que aprender a tomar decisiones con incertidumbre. Y eso requiere información, educación, y voluntad política".

Sigue toda la última hora en el canal de Whatsapp de Radio Valencia:haz clic aquí y suscríbete para recibir toda la información y la actualidad del día en tu móvil.

Jose Forés Romero

Redactor en Radio Valencia desde 2024, editor...