La presidenta de la Comissió invita a vivir las fiestas con ilusión

Benidorm

A pocos días del inicio de las Festes Majors Patronals de Benidorm, la presidenta de la Comissió reconoce que le gustaría que el día tuviera “25 horas”. Y no es para menos. Tras once intensos meses de preparativos, llega el momento culminante de un año de trabajo, ilusión y esfuerzo compartido por un grupo de festeros que ya lo tiene todo listo para el gran acontecimiento del calendario benidormense.

En conversación con A Vivir Benidorm, la presidenta asegura que la experiencia ha sido “muy bonita” y que la recomendaría “a cualquiera que tenga espíritu festero”. “Hay que pasar por aquí al menos una vez”, comenta con una sonrisa. A pesar de la enorme dedicación que exige el cargo, confiesa que “merece la pena” y que ahora sólo queda “invitar a todo el mundo a disfrutar de los eventos y espectáculos que se han organizado”.

“Cuando suena Festa en Benidorm, sabes que ya estamos en fiestas”

En la entrevista, la presidenta repasa algunos de los momentos más especiales vividos durante el año, destacando la coronación, la ofrenda de marzo o las verbenas populares, aunque le resulta imposible quedarse solo con uno. “Cada acto tiene algo que te emociona. Es mucho trabajo, pero también muy divertido”, explica.

También tiene claro cuál es el instante que marca realmente el inicio de las fiestas: “El volteo de campanas marca el arranque oficial, pero cuando suena Festa en Benidorm y ves a todas las bandas, ahí es cuando dices ‘¡ya estamos en fiestas!’”.

Durante la charla, la presidenta celebra también la implicación creciente de los jóvenes en la parte más tradicional de las fiestas, algo que considera “fundamental para garantizar su futuro”.

“Me alegra muchísimo ver cómo los jóvenes se interesan cada vez más por nuestras raíces. No sólo disfrutan del ocio, sino que también participan activamente en los actos más tradicionales”, afirma.

Según explica, este proceso ha surgido de manera natural: “Ellos mismos lo han ido pidiendo. Eso ayuda a divulgar y perpetuar nuestras costumbres. Lo más importante no es sólo organizar las fiestas, sino procurar que continúen los arraigos y las tradiciones que las hacen únicas”.