Carolina Climent, la investigadora de La Pobla del Duc que une ciencia, género y territorio

La Pobla del Duc (La Vall d'Albaida)

La investigadora y docente Carolina Climent Sanz, originaria de La Pobla del Duc, es una de las protagonistas de la exposición itinerante “Lideresses Rurals”, organizada por la Mancomunitat de Municipis de la Vall d’Albaida. La muestra reconoce a mujeres del territorio que destacan en ámbitos como la salud, la ciencia y la innovación, visibilizando su aportación al desarrollo rural.

Doctora en Ciencias Biomédicas, Climent compagina su labor docente en la Universitat Internacional de Catalunya (UIC Barcelona) con la investigación sobre dolor crónico y fibromialgia, un campo en el que colabora con universidades de todo el mundo. Su trabajo pone el foco en la necesidad de visibilizar el dolor femenino y promover una mayor presencia de mujeres en la investigación médica.

En declaraciones a Radio Ontinyent Cadena SER, la investigadora ha expresado su satisfacción por formar parte del proyecto: “Fue una sorpresa muy bonita y un orgullo. Aunque hace años que vivo fuera de mi pueblo, ver mi historia junto a la de otras mujeres de la Vall d’Albaida me ha hecho sentir muy vinculada a mis raíces”.

La mujer en la ciencia

Climent subraya que este reconocimiento trasciende lo personal y representa una forma de mostrar que “la ciencia y el compromiso social también pueden nacer en el mundo rural”. De su experiencia en La Pobla del Duc, destaca dos aprendizajes: el sentido de comunidad y la necesidad de buscar oportunidades incluso cuando los recursos son limitados.

Sobre su campo de investigación, explica que se están logrando avances gracias a las nuevas técnicas de la biomedicina: “Podemos identificar biomarcadores que esperamos ayuden al diagnóstico de enfermedades como la fibromialgia”. Además, apunta que el futuro pasa por la personalización de los tratamientos, alejándose de los enfoques “de talla única”.

Climent, que ha desarrollado su formación en centros internacionales como la Universidad de Toronto y la Johns Hopkins University, combina una visión humana y científica del dolor. “Aprendí a escuchar a las personas para entender cómo viven con el dolor. Intento trasladar eso a la docencia, para que el alumnado vea que la ciencia no son solo datos, sino también personas y contextos”, afirma.

Una medicina más inclusiva desde el mundo rural

La investigadora también defiende la necesidad de una medicina más inclusiva: “Históricamente, muchos estudios médicos se han hecho pensando en el cuerpo masculino. En el caso del dolor, las mujeres a menudo se sienten invalidadas o estigmatizadas. Avanzar hacia una medicina con perspectiva de género es, en realidad, avanzar hacia una medicina más justa”.

Para Climent, la exposición “Lideresses Rurals” tiene un valor especial: “Este tipo de proyectos pone cara y nombre a las mujeres que, desde el mundo rural, hacen cosas extraordinarias. Da referentes a niñas y jóvenes, y demuestra que se puede innovar y liderar también desde los pueblos”.

La ciencia es de todas las personas y para todas las personas. También desde el mundo rural se puede innovar y liderar

—  Carolina Climent, investigadora y docente de La Pobla del Duc