Cuando la soledad no es deseada

Valencia

Andrés Ortega, autor del libro “Soledad sin solitud. Por qué tantos están hoy tan solos”, ha visitado el programa 'Hoy por Hoy Valencia' para participar en un programa especial sobre la soledad. El escritor, nieto del filósofo Ortega y Gasset, e hijo de Simone Ortega, autora del mítico bestseller sobre gastronomía “1.080 recetas”, ha aprovechado la presentación de su libro para hablarnos de la soledad.

La imagen de una pareja en un restaurante, absortos cada uno en la pantalla de sus smartphones, sin departir entre sí, sin siquiera mirarse, es común en cualquiera de nuestros países. Paradójicamente, la «gran conexión» que estamos viviendo genera una «gran desconexión». La primera nos roba atención y relaciones sociales, y nos impide cultivar la indispensable solitud.

A diferencia del inglés, el castellano no diferencia entre loneliness y solitude por lo que aquí se propone recuperar claridad con el vocablo «solitud», para esa «retirada estratégica a sí mismo» (Ortega y Gasset), tan necesaria para la vida diaria, individual y social, y para la creación científica y artística.

Pero, cree Andrés Ortega, la soledad no es una «enfermedad», menos aún una «epidemia», aunque su crecimiento afecta a la salud y al bienestar de las personas. Nunca en la historia ha vivido tanta gente sola, no únicamente por falta de medios, sino muy a menudo como opción vital. Y en torno a la soledad ha nacido una economía que también tiene sus cadenas globales.

Ortega se manifiesta pesimista a corto y medio plazo, pero a largo plazo cree que la sociedad encontrará soluciones. Se requieren nuevas relaciones sociales, saludar a los vecinos y reaprender a retirarnos en nosotros mismos.

En el programa también ha intervenido la psicóloga Purificación Párraga, psicóloga de intervención social y vocal del Colegio Oficial de Psicología de la Comunitat Valenciana. Para ella, la soledad buscada es muy positiva, especialmente en edades adolescentes. Otra cosa es la soledad no deseada, un factor de riesgo que nos hace más vulnerables, y especialmente en las personas mayores, puede derivar en diferentes enfermedades.

La soledad no deseada asienta sus bases desde el mismo momento del nacimiento, y tiene relación con el grado de afectividad de los padres con sus hijos. Esto marcará las bases de cómo seremos capaz de relacionarnos en el futuro. Purificación señala que la imagen de una familia en una cafetería y con un niño al que le han dejado un móvil para que se entretenga y no moleste es muy significativa, pues a la larga derivará en dificultad para mantener relaciones sociales.

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