La ONU le planta cara al sedentarismo: la actividad física es un derecho social

Alicante

El pasado 25 de septiembre los jefes de estado y de gobierno reunidos en la Asamblea General de Naciones Unidas aprobaron la Declaración Política sobre Enfermedades No Transmisibles (ENT) y Salud Mental.

Según al ONU "las ENT, incluidas las enfermedades cardiovasculares y pulmonares, el cáncer y la diabetes, son las principales causas de muerte en todo el mundo, y en 2021 se cobraron al menos 43 millones de vidas, incluidas las de 18 millones de personas menores de 70 años. Cuatro de cada cinco (82 %) de esas muertes prematuras se dan en países de ingreso bajo y mediano. Las condiciones de salud mental afectan a más de mil millones de personas en todo el mundo".

Además, Naciones Unidas añade que "las ENT están aumentando en todos los países y afectan a todas las comunidades, lo que las convierte en problemas urgentes para la salud pública, la productividad y el crecimiento económico sostenible".

Objetivos globales 2030

Por todo ello, los gobiernos acuerdan marcar una hoja de ruta global para que en 2030 el número de consumidores de tabaco se reduzca en 150 millones de personas; otros 150 millones más tengan controlada la hipertensión y puedan acceder a la atención de salud mental.

Y entre los compromisos, establece "promover la actividad física aumentando el número de espacios públicos en los que las personas, a lo largo de todo el curso vital, puedan estar físicamente activas".

Por tanto, Naciones Unidas reconoce que la educación física, la actividad física y el deporte son herramientas que contribuyen a hacer frente a las Enfermedades No Transmisibles y mejoran la Salud Mental.

En Hoy por Hoy Alicante, el catedrático de Educación Física y Deportiva de la Universidad de Alicante, José Antonio Pérez Turpin, ha puesto de manifiesto la importancia de esta decisión y todo lo que implica.

Recuerda que el 47 % de la población española padece problemas de obesidad, una epidemia impulsada por la falta de actividad física, de sueño y por el estrés.

A su juicio, Naciones Unidas recuerda que la actividad física es un derecho de la ciudadanía y por ello, se deben potenciar los espacios activos en las ciudades. Por otra parte, considera que también hay que poner en marcha programas sociales de educación física.

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