A la nueva cúpula de la CEV: nunca renuncien a su independencia

Alicante

CEV, la patronal de la Comunitat Valenciana, inicia una nueva etapa tras el relevo de sus presidentes autonómico y provinciales.

Salvador Navarro, el presidente saliente, en su despedida tras 14 años, ha recordado que los ciudadanos de la Comuntat Valenciana se merecen más. Con sus errores y aciertos, Navarro ha sabido vertebrar territorialmente a la organización, ha tenido una visión mucho más amplia que la meramente empresarial y eso le ha convertido en una voz respetada e influyente.

Y si la historia de esta autonomía nos enseña algo, especialmente a los agentes sociales, es que actuar como gregario del inquilino de turno del Consell no es bueno para el conjunto de la sociedad ni para el propio colectivo.

A la nueva cúpula empresarial habría que pedirle que elevara la mirada y que nunca renunciara a su independencia. Y más en estos momentos en los que mucho más necesario que reconstruir lo material, que sin duda es importante, lo verdaderamente primordial es lo emocional, la cohesión social y la recuperación de la confianza en las instituciones y en el propio sistema democrático. Y para ello es necesario pasar página.

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