Torrent: "En el Xenillet el abandono y la segregación vienen de lejos pero se han acentuado con la DANA”

València

En el capítulo 47 de Valencia 2025: Renacer tras la DANA visitamos Torrent, concretamente el barrio de Xenillet, una zona con problemas estructurales anteriores a la catástrofe natural que se han agudizado con las inundaciones.

Ana Molina, Teresa Torres, Lorena Hernàndez y Chelo Muñoz son cuatro vecinas del barrio que nos cuentan cómo está el Xenillet un año después de la DANA junto a Toni Velarde, del Col·lectiu Soterranya, que trabaja desde hace años con los vecinos de este barrio.

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El barranco se tragó sus casas

Ana Molina y Teresa Torres vivían en dos casas junto al barranco que a día de hoy han desaparecido por completo. El barranco del Poio que aquí también recibe el nombre de barranco de Torrent arrasó las viviendas donde la familia de Teresa ha crecido y se han quedado integradas en el barranco.

Desde entonces, Teresa vive en un convento mientras Ana vive en una vivienda de alquiler social. Sin embargo, piden volver al Xenillet y una casa como la que perdieron el 29 de octubre de 2024. "Me fui corriendo con un bolso, la cartilla y el DNI y cuando me quise dar cuenta el agua ya llegaba a la mitad de la cuesta". Explica Ana que acude casi a diario al ayuntamiento para pedir responsabilidades y protestar por su situación porque dice que a día de hoy no tiene solución a su situación.

"Mi vivienda no vale la cantidad que me quiere ofrecer, eso es miseria. Yo no quiero que me den nada por lo alto, pero sí el valor que por ley valía el suelo". "Ellos han sido los primeros culpables porque yo he estado pagando una contribución y mientras se ha pagado no se ha considerado que mi casa estaba en zona inundable", explican.

Un barrio olvidado

Lorena, Chelo y Toni ponen el acento en que este barrio ha estado siempre olvidado, antes de la DANA. "Vivimos personas normal y corrientes, pero estamos olvidados", explica Lorena. "Aquí vive gente mayoritariamente de etnia gitana y como todo el mundo les tiene como tirria, pues yo creo que todo empieza un poco por ahí".

Chelo añade que incluso la ubicación les hace estar segregados, "Estamos en un lateral de Torrent", parece que no forman parte del núcleo urbano, "ahí no molestan". Incluso Lorena va más allá en su denuncia sobre la situación del barrio, lamenta que incluso la policía local no acuda cuando reciben llamadas del Xenillet.

El Col·lectiu Soterranya, que trabaja desde hace décadas en este barrio, ofrece muchas alternativas y servicios sociales para estas familias vulnerables aunque Toni, que forma parte del Col·lectiu desde hace 21 años señala que el barrio es muy poco permeable. "No entra prácticamente nadie de fuera ni sale nadie de aquí". De hecho, de los voluntarios del este colectivo alrededor del 98% son de fuera de Torrent.

Y eso, según cuentan, también se notó en la DANA y la posterior oleada de solidaridad. "Pasó con el voluntariado, vino gente, sí, pero no al nivel que fue a Picanya, a Paiporta o a cualquier pueblo afectado por la DANA. Veíamos vecinos de nuestra pueblo pasar por la esquina para limpiar barro pero diriéndose a Picanya, o a Paiporta, y dejando de lado el barrio".

Pasó lo mismo en pandemia. Son, lamentan, los olvidados de los olvidados, así que si una catástrofe afecta extremadamente a un municipio como se ha visto con la DANA, lo hace doblemente a un barrio que sufre males endémicos de pobreza, exclusión social y adiciones.

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