Las víctimas de la secta de Vistabella dividen en dos etapas su vida en La Chaparra: Una infancia idílica y una adolescencia de abusos
Informes psicológicos señalan que "la identidad de las víctimas estaba manipulada"

Imagen de archivo de la Audiencia Provincial de Castellón / Radio Castellón (Radio Castellón)

En la onceava vista del juicio de la secta de Vistabella ha sido el momento de escuchar el testimonio de peritos. El psicólogo y la psiquiatra que ha evaluado a varias víctimas han señalado que las mismas dividían su vida en la masía La Chaparra, lugar de residencia de los miembros de la comunidad, en dos etapas muy claras. Una primera etapa coincidía con la infancia y la definían cómo idílica, la segunda etapa corresponde a la adolescencia, concretamente en las mujeres a partir de que les llegara el periodo por primera vez, y en este caso la definían como una etapa de abusos sexuales y humillaciones.
Más información
El perito psicólogo sostiene que las víctimas arrastrarán secuelas psicológicas durante toda o gran parte de su vida necesitando asistencia psicológica e incluso el consumo de fármacos. Los cinco informes presentados en el juzgado señalan que varias de las víctimas presentan estrés postraumático, ansiedad y disociación a causa de lo vivido en la masía La Chaparra. Además, este psicólogo también ha indicado que “no hubo consentimiento” en lo referente a las prácticas sexuales “porque la identidad de las víctimas estaba manipulada, adoctrinada”. El psicólogo ha insistido durante el juicio que en la comunidad se jugaba con el miedo, la ansiedad y la culpa.
“Padres desconectados”
Este psicólogo, encargado del peritaje de algunas de las víctimas y testigos ha afirmado que por lo que se puede observar escuchando sus testimonios, los hombres que residían en la masía “estaban desconectados de lo que ocurría en La Chaparra”, que la mayoría de ellos trabajan muchas horas y “no había tiempo para la reflexión”. Además, "los pensamientos se exponían ante todos en la mesa y podían ser motivo de humillación”. Con esto el psicólogo ha señalado que el líder de la comunidad ya fallecido, el Tío Toni, aprovechaba para ejercer esa figura paternal y con ello conseguía que los miembros de la comunidad sintiesen “apego al líder, suplantando la identidad de los padres”.
Más información
Este psicólogo que lleva 30 años dedicándose a trabajar con miembros y víctimas de grupos de este tipo de comunidades afirma que cualquier “grupo de alto control ideológico se apoya en un círculo jerárquico que apoya al Gurú”, en este caso al Tío Toni.
Más información
Causa abierta
En el juicio por la secta de Vistabella, que arrancó el pasado 3 de noviembre, y en el que hay hasta seis personas acusadas de nueve delitos de abuso sexual, seis de ellos en menores y un delito de asociación ilícita, han testificado hasta ahora más de la mitad de testigos, víctimas y algunos peritos. No será hasta la primera semana de diciembre cuando los acusados presten declaración.
Algunos, en sus declaraciones, hicieron referencia a los abusos sexuales que el líder de la secta y los acusados cometían sobre otros miembros, algunos de ellos menores. El líder de la secta conocido como el Tío Toni falleció en 2022 en prisión preventiva cuando se investigaba esta causa.




