Secuelas de una mala alimentación

Villena

Ya hemos visto de qué se compone una dieta: proteínas, carbohidratos, grasas, vitaminas, minerales y AGUA. El agua es muy importante. En gatos geriátricos de vital importancia, y en gatos y en perros, siempre bebedero limpio, agua del día y si son varios bebederos mejor que mejor.

Ahora bien, vistos los componentes de la dieta, ¿Cómo suministrarlos a nuestro animal? ¿En qué forma y medida?

Porque más allá de poner un plato con pienso o comida húmeda, detrás hay decisiones nutricionales importantes: ¿Qué debe contener la dieta? ¿en qué proporción? ¿por qué los perros no comen exactamente igual que los gatos? ¿Cuáles son las opciones que existen hoy en el mercado y cuáles sus ventajas/inconvenientes? Porque no todas las opciones son válidas.

Empecemos por la peor opción, que es que el animal se alimente de las "sobras" de casa. Porque hay personas que con todo el amor les cocina una dieta que consideran aceptable o que cuentan con él a la hora de hacer la comida en casa.

Una dieta basada en esto, no es equilibrada. Ni es completa (porque no lleva todos los componentes que hemos mencionado al principio) ni es equilibrada (porque no lleva esos componentes en la proporción necesaria para la especie, raza, edad o el estado de salud del animal).

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Este tipo de alimentación se da sobre todo en perros, porque los gatos son muy sibaritas a la hora de comer, son más especiales en cuanto a elegir el alimento, además de que son neofóbicos, no soportan los cambios, a ellos les gustan las cosas siempre igual a la misma hora, tener su rutina diaria, así que imagínate que se le diese la dieta de casa que un día es pescado, otro día es carne, otro día lentejas, paella y macarrones. Imposible.

Y al perro, esto le va a encantar, que se lo come que da gusto ver lo que disfruta, pero que le guste no significa que sea bueno para él. Porque ya os digo yo que no lo es, ya he dicho que ni es completo ni es equilibrado, y una dieta de esas características van a provocar en el animal enfermedades a corto plazo, a medio y a largo plazo. Es decir, estamos jugando con la salud de nuestro animal.

Que levanten la mano las personas que tienen un perro, le dan sobras (aunque coma pienso y la comida de casa sea un extra) y su perro vomita a veces. Ya sean una/dos veces a la semana o al mes. Pongo la mano en el fuego y no me quemo, que la han levantado todos.

Los perros, con nuestra comida, sufren de gastritis y enteritis agudas (a corto plazo), y sufren gastritis crónicas ( a medio plazo). El típico perro que, es que le ha sentado mal la comida y tiene vómitos agudos y diarrea, o el perro que en ayunas vomita amarillo y/o que cuando sale a la calle come hierba (eso es una gastritis crónica), o hay días que no come. No come porque le duele el estómago, igual que come hierba porque le duele el estómago de la inflamación que tiene). Y es que no falla.

Y no hace falta que sólo se alimente de dieta casera, perros que comen pienso y además se le da una parte de dieta casera, también sufren estas patologías, porque primero, antes que el pienso se van a comer la comida casera, y segundo, porque esa comida casera desplaza y sustituye a la cantidad de pienso que le tocaría comerse al día. Ahí ya tenemos los déficits alimentarios.

Otra patología muy asociada a la dieta casera: la enfermedad periodontal. Ya hablamos de ella en la temporada pasada y de las graves consecuencias que conlleva.

Y a largo plazo, las repercusiones de una dieta pobre son muy variadas y peligrosas también.

Un déficit en cantidad de proteínas ( y por qué no decirlo también, en la calidad de la proteína), produce pérdida de masa muscular, retraso en el crecimiento, debilidad, inmunosupresión (que significa que el sistema inmune ni se le ve ni se le espera).

Un déficit en determinadas vitaminas, provoca: ceguera, alteración en el crecimiento, raquitismo (que es una enfermedad del crecimiento óseo que se produce en animales jóvenes, tanto por falta de vitamina D, como de calcio y fósforo, los huesos se quedan débiles, blandos o deformados). Más consecuencias de un déficit en vitaminas: infertilidad, problemas neurológicos, alteraciones de la coagulación, etc. Como problemas cardiacos en gatos que no reciben taurina.

Déficits en minerales provocan desde raquitismo, que lo he comentado antes, hasta fracturas óseas, dermatitis, retraso en la cicatrización, inmunosupresión y un largo etcétera.

Un déficit en hidratos de carbono, sobre todo hablamos de la dieta famosa "grain free" provoca cambios en el corazón y está relacionada con la cardiomiopatía dilatada en perros.

La semana pasada estuve en una formación de ecocardiografía, y la ponente habló sobre esto, que cuando les hace la entrevista a los tutores del animal enfermo, para recabar toda la información y hacer una buena anamnesis, cuando llegan a la pregunta de la alimentación y los tutores dicen que les da pienso grain free, se echa las manos a la cabeza, porque ya sabe lo que se va a encontrar, porque es que es una dieta que hasta en razas no predispuestas, puede generar enfermedad cardiaca. Y además porque se hace sin ningún rigor ni por prescripción veterinaria, es simplemente porque está de moda y el que le vende el pienso le vende el pienso y le vende la moto, porque un perro, que está sano, es OMNIVORO, come de todo y no hay por qué restringir los cereales así porque sí. Como dije en el anterior programa, los grain free existen para determinadas situaciones, no se puede dar porque es la moda, igual que años anteriores la moda era dar pienso de salmón. Hay perros que pueden ser intolerantes, y entonces evitamos darle lo que les sienta mal, igual que también existe el pienso gluten free, que los neurólogos lo utilizan ante enfermedades como la disquinesia paroxística, que es parecido a una epilepsia, pero no damos pienso gluten free al primer perro que nos llega a la tienda de piensos.

Así que ya hemos visto lo que una dieta casera sin supervisión puede provocar y también las dietas sin cereales.

Y he dicho dietas caseras sin supervisión, ya que en nuestra profesión existen las veterinarias nutricionistas, que son las profesionales especializadas en elaborar dietas para todo tipo de situaciones y todo tipo de animales. Así que si quieres que tu perro/gato se alimente a base de comida de casa, hazlo bajo el criterio veterinario de estas especialistas.