Peste porcina africana: qué es y qué riesgo supone
El veterinario Joaquín Gómez Bau explica la situación actual de la enfermedad, su impacto en la ganadería y la importancia de la bioseguridad
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Los veterinarios lanzan un mensaje de tranquilidad por los primeros casos de peste porcina en España.
Gandia
Joaquín Gómez Bau, veterinario del Colegio Oficial de Veterinarios de Valencia (ICOVV), miembro de su Junta de Gobierno y director general de Política Agraria Común (PAC) de la Conselleria de Agricultura, explica con detalle qué es la peste porcina africana y cuál es la situación actual.
Una enfermedad que no afecta a las personas
"Lo primero que queremos transmitir es un mensaje de tranquilidad. La peste porcina africana es una enfermedad no zoonósica, es decir, no supone ningún riesgo para las personas, ni por el contacto con los animales ni por el consumo de carne de cerdo o sus derivados. Todo es completamente seguro", señala Gómez.
Sin embargo, insiste en que la detección de esta enfermedad en jabalíes genera una gran preocupación sanitaria, ya que constituye un problema muy serio para la sanidad animal y tiene un fuerte impacto productivo, económico y comercial en el sector porcino.
Altamente contagiosa y con elevada mortalidad
Según explica, se trata de una enfermedad de evolución muy aguda, con una sintomatología inespecífica pero con una mortalidad que suele alcanzar el 100%. Es extremadamente contagiosa y está sometida a vigilancia y programas de erradicación por parte de la Unión Europea, debido a su importancia sanitaria, económica y también medioambiental, ya que afecta a todos los suidos, tanto domésticos como silvestres.
La peste porcina africana llegó a Europa del Este en 2007 y, desde entonces, ha avanzado progresivamente hacia el oeste, principalmente por el movimiento de jabalíes. En 2014 alcanzó las fronteras de la UE y actualmente está presente en jabalíes y en explotaciones de cerdo doméstico en 12 países europeos.
España, 30 años libre de la enfermedad
España está libre de peste porcina africana desde 1994, un logro que Gómez atribuye al trabajo constante del sector: "Son décadas de esfuerzo profesional, protocolos rigurosos de bioseguridad, vigilancia veterinaria continua y asesoramiento a los ganaderos".
Hoy en día, las explotaciones porcinas españolas aplican medidas de bioseguridad muy estrictas: cambios obligatorios de ropa, duchas, controles de acceso y protocolos de desinfección, entre otros.
Situación actual y necesidad de extremar la bioseguridad
Recientemente se ha detectado una mortalidad significativa de jabalíes en Cataluña, el segundo productor nacional de porcino, solo por detrás de Aragón. Este hecho obliga a extremar las precauciones, ya que el virus no solo se transmite por contacto directo entre jabalíes, sino que también puede permanecer durante mucho tiempo en el medio ambiente y viajar a través del calzado, la ropa, los vehículos o productos cárnicos contaminados procedentes de países afectados. Si un jabalí consume restos contaminados, puede infectarse.
A pesar de ello, Gómez destaca que la detección temprana de los animales afectados demuestra la eficacia de los sistemas de vigilancia. Además, recalca que no se ha detectado ningún caso en explotaciones ganaderas y que el nivel de seguridad en estas instalaciones es muy elevado.




