El comercio de Benidorm atribuye uno de sus peores años al calor y la Zona de Bajas Emisiones

Benidorm

Benidorm vive uno de sus mejores momentos turísticos, con niveles de ocupación hotelera que parecen no tener techo. Sin embargo, el comercio local ha atravesado uno de sus peores años, con caídas de ventas históricas que alcanzan hasta el 50% durante el verano. Los empresarios locales señalan como principales causas el cambio climático y la nueva Zona de Bajas Emisiones (ZBE).

Raúl Parra, presidente de la Asociación Independiente de Comerciantes de Benidorm (AICO), ha explicado en declaraciones a Radio Benidorm que “cuanto más calor hace, menos se compra. Y por otro lado, la implantación de la zona de bajas emisiones ha restado muchísimo, ha dado miedo a la gente de otras poblaciones a bajar a la ciudad”. Para contrarrestar este temor, los comercios han lanzado campañas informativas sobre aparcamientos y zonas permitidas.

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Según Parra, “no está llegando ninguna multa y los comercios podemos registrar las compras”. Aun así, el mal verano ha dejado su huella en las cuentas de los negocios, que buscan maneras de recuperar la confianza de los clientes y aumentar las ventas.

A pesar del contexto adverso, hay motivos para la esperanza. El incremento de turistas extranjeros con mayor poder adquisitivo y la desaparición de la temporada baja están ayudando a sostener al sector durante el resto del año. Los locales vacíos empiezan a ocuparse y se anuncian nuevas aperturas, lo que indica según Parra signos de recuperación de cara al futuro.

“Se están entregando muchas viviendas con alto poder adquisitivo en toda la comarca y eso va a generar más movimiento económico”, comenta el presidente de AICO. Los comerciantes confían en que el próximo verano llegue con más sombra en las calles, más aparcamientos y menos temor a la zona de bajas emisiones, condiciones que consideran necesarias para que el auge turístico también se traduzca en ventas.