Hermann Schwarz: "Se están manteniendo estructuras de épocas pasadas en pleno siglo XXI y hay que dimensionar el tiempo y la gestión"

Alicante

Los médicos están desde este martes hasta el próximo viernes en huelga.

El Foro de Médicos de Atención Primaria de la Comunidad Valenciana respalda estos paros, que el próximo jueves 11 vendrán acompañados de concentraciones en los hospitales de toda la Comunitat.

Movilizaciones que se llevan a cabo frente al borrador del Estatuto Marco promovido por el Ministerio de Sanidad.

El seguimiento, según el sindicato médico CESM, ha sido del 90% en Atención Hospitalaria y del 75% en Atención Primaria, y del 15% según la Conselleria de Sanidad, lo que supuesto la cancelación de unas 8.000 consultas, 6.000 pruebas y 206 intervenciones quirúrgicas.

Señalan, no obstante, desde Comisiones Obreras, que la incidencia no es mucha, pero que el viernes ya se desprogramaron varias operaciones de quirófano que se podían demorar y ello genera más lista de espera.

Desde el Colegio de Médicos explican que lo que reclaman es una normativa específica para el colectivo médico que garantice excelencia profesional, eficiencia del Sistema Nacional de Salud y seguridad del paciente.

Se están manteniendo estructuras de épocas pasadas en pleno siglo XXI, dice el presidente del Colegio de Médicos de Alicante, Hermann Schwarz, y se requieren cambios importantes, empezando por un dimensionamiento adecuado del personal y un uso razonable del tiempo.

Atención Primaria necesita una hoja de ruta que permita trabajar con agendas de calidad, cupos dimensionados y acabar con las “agendas infinitas” que limitan actividades clínicas esenciales como la cirugía menor o las ecografías.

Se está entrado en una situación límite, con la falta de médicos, saturación, listas de espera inaceptables y ausencia de inversión suficiente, insiste.

El borrador de Estatuto Marco preocupa

Del borrador de Estatuto Marco del Ministerio de Sanidad preocupa, sobre todo, según señalaban en un comunicado: la clasificación profesional, que continúa invisibilizando la alta cualificación del médico. Una jornada laboral inasumible, sin máximos, supeditada a las ‘necesidades del servicio’, que pone en riesgo la calidad de la asistencia, así como la salud física y mental de los médicos.

También la no computación de las horas de guardia realizadas por los médicos a lo largo de su carrera como tiempo efectivo de trabajo a efectos de la jubilación. O la falta de medidas reales para garantizar la formación continua, el desarrollo profesional, o simplemente tiempo para atender a los pacientes con dignidad.