Agujeros en el techo de la cocina, grietas, puertas rotas y un patio sin columpios ni porterías: el día a día del CEIP San Juan de Ribera de València

València

Después de meses, incluso años, llamando a las puertas de la conselleria de Educación y del ayuntamiento de València y recibiendo la callada por respuesta, el AMPA del colegio público San Juan de Ribera ha decidido mandar una carta a los Reyes Magos para ver si con sus majestades tienen más suerte y por fin les arreglan todos los desperfectos que tienen en el centro en el que estudian más de 200 niños y niñas.

"Me llamo Sofía y tengo 8 años. Este año me he portado muy bien y quiero pediros un regalo muy especial. Me encanta mi colegio, pero hace tiempo que veo cosas que no me gustan y no sé qué hacer". Así empieza la carta que el AMPA de este colegio de la calle Cirilo Amorós, en pleno centro de la ciudad, ha escrito para denunciar la situación insostenible que viven.

Lo más grave, la fachada del colegio que da al patio tiene una importante grieta estructural que está pendiente de ser reparada, pero dentro del centro la cosa no está mejor, como explica en declaraciones a la Cadena SER, Sara Manzanares, la presidenta del AMPA.

Manzanares denuncia que hay un agujero en el techo de la cocina del colegio que supone un riesgo para la salud, ya que de él pueden salir cucarachas y otros insectos.

Además, el interfono del comedor no funciona y esto dificulta la labor diaria del personal del comedor y hay puertas rotas que nadie repara.

Además, llevan años pidiendo un toldo para hacer frente a las altas temperaturas y a la falta de sombra de nuestro patio, un patio en el que por fin hay porterías, pero que no pueden ser usadas porque nadie ha ido a instalarlas.

El caso es que se han puesto en contacto en numerosas ocasiones con la conselleria y el ayuntamiento, pero todas sus reclamaciones caen en saco roto y la situación afecta al día a día y a la seguridad de los niños y niñas y el personal docente.

Sin noticias de incidencias, según Educación

Por su parte, fuentes de Generalitat han explicado que el personal técnico de la conselleria de Educación estuvo allí este verano y el centro no le trasladó que hubiera incidencias. Por otra parte, el toldo está en fase de licitación y las porterías cuentan con la autorización por parte de la Conselleria.

Un problema del cambio de contrata, según el ayuntamiento

Y el ayuntamiento explica que recientemente se ha producido un cambio en las contratas de mantenimiento, lo que ha demorado alguna de las obras programadas en este centro.

Por ejemplo, ya se ha pedido a la nueva contrata que instale las porterías, aunque se está estudiando cómo hacerlo para no generar filtraciones en el aparcamiento que hay debajo.

El agujero del techo de la cocina se realizó para efectuar una reparación en la red de saneamiento. Se iba a instalar ahí un registro, pero se ha retrasado por el cambio de contrata. Tres cuartas partes de lo mismo pasa con las puertas estropeadas o el interfono del comedor, que también está averiado.

Y sobre la fisura en la fachada del colegio que da al patio, explican en el ayuntamiento que ya se inspeccionó hace unos meses y se observó que era un problema del mortero monocapa por dilataciones, no una grieta estructural. Se está valorando la opción para su reparación, que no es sencilla, debido a la dificultad de acceso a la zona de trabajo.

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