Juzgan hoy a unos padres acusados de asfixiar a su bebé

Esta mañana comienza en Sevilla el juicio con jurado al padre y la madre de un bebé de un mes que falleció cuando su padre le introdujo un trozo de papel higiénico en la boca para que dejara de llorar. La fiscalía solicita 20 años de prisión para él por asesinato y 13 para ella por homicidio.

El papel tenía una longitud de cuatro centímetros y medio y un grosor entre uno y medio y dos centímetros. Según el relato del fiscal, a las seis de la mañana el padre se hizo cargo de la niña que había estado llorando insistentemente toda la noche y para que se callara formó una bola con el papel y se la introdujo hasta el esófago, lo que también le bloqueó la traquea. Después, cuando la niña no respiraba se la mostró a su madre que en lugar de salir corriendo al hospital se quedó en su casa. Vivían a trescientos metros del Macarena y para evitar que los descubrieran decidieron llamar al cero sesenta y uno casi una hora después y al mismo tiempo, para simular que prestaban auxilio a la niña la llevaron al hospital. Según el fiscal, la niña estaba muerta y de nada sirvieron las maniobras de resucitación. El padre y la madre contaron a los médicos que el bebé se había tragado un papelito que el padre le puso en un labio para curar una herida.