El ex director de trabajo, Javier Guerrero, es partidario de que la jueza de los ERES lea las actas de los consejos de gobierno
Guerrero dice que es contradictorio que la Junta actúe como perjudicada y se oponga a que "se llegue hasta el fondo"
Tanto el ex director general de trabajo, Javier Guerrero, como el ex delegado de empleo en Sevilla, Antonio Rivas, muestran su disconformidad con la solicitud de inhibición instada por la la Junta de Andalucía y creen que la jueza Alaya sí puede consultar las actas de los consejos de gobierno. En sus escritos cargan contra la postura de la Junta de Andalucía en este conflicto de jurisdicción.
Resulta llamativo, afirman las defensas de Guerrero y Rivas, que quien actúa como parte perjudicada y acusadora, al objeto de poder recuperar las cantidades que hubieran podido ser detraídas del erario público, se oponga a que se esclarezca la verdad y se llegue hasta el fondo del asunto. Y se oponga también, señalan, a que se pueda conocer "la naturaleza, el alcance o el conjunto de circunstancias que en relación con los hechos investigados se tuviera en la JUnta, en cualquiera de sus niveles".
Los abogados de Guerrero y Rivas, como dijo la jueza en uno de sus autos, piensan que eliminando de las actas aquellas expresiones que pudieran de algún modo vulnerar el deber de secreto o de reserva está garantizado que se guarda ese secreto.




