Lissavetzky quiere acabar con el dedazo en los teatros municipales

Están convencidos los socialistas de que la cultura es el espantapájaros del miedo y, por ello, para evitarlo, quieren dar oportunidades a los creadores sin convertirse en los protagonistas. Y lo quieren hacer pensando en los barrios, en cada distrito, alejados de los grandes gestos que no perviven más que unos instantes, como la Noche en Blanco.

O como las grandes obras que publicita Gallardón pero que, acusan, olvidan zonas de Madrid donde también viven madrileños. Por eso, Lissavetzky dice que no le parece mal que se vaya a unir la Gran Vía con el río, pero se pregunta que otras obras propone el alcalde para otros barrios.

Los socialistas quieren acabar con el dedazo como fórmula para elegir a los directores de los teatros Fernán Gómez y Español y mantener abiertas las bibliotecas durante los fines de semana para acercar la cultura a todos los vecinos.

Además, se comprometen a cambiar el nombre al departamento de las Artes para volver a llamarlo Concejalía de Cultura.

Factor "Botella"

Lissavetzky ha reafirmado su compromiso y ha asegurado que se mantendrá en el ayuntamiento alá donde decidan los votantes. Y, de manera sibilina, ha vuelto a recordar que Gallardón no parece que vaya a cumplir su compromiso porque cree que piensa en la posibilidad de sustituir a Rajoy si este perdiera las eleeciones. Y por ello, avisa a lo madrileños que la número dos de la candidatura popular es Ana Botella, quien acabaría siendo alcaldesa si Gallardón dejará Cibeles.