Desarticulada una banda que asaltaba chalets en la zona noroeste de la región

Los ladrones accedían a los domicilios mediante la fractura de los cerramientos más débiles, generalmente ventanas y puertas de aluminio de cocinas y baños. La famosa puerta de servicio siempre endeble frente a la puerta principal blindada. Un asunto que deberían revisar muchos propietarios.

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Minutos antes del robo los cacos habían llamado al timbre para comprobar que los ocupantes ya se habían marchado a trabajar. Por eso siempre operaban en urbanizaciones que se quedan literalmente vacías de lunes a viernes.

Ya dentro de la casas buscaban principalmente aparatos electrónicos. Hay una razón de peso para explicar porque no sustraían joyas o relojes con frecuencia: carecían de un receptador, la persona que compra esos artículos sabiendo que han sido robados.

Los siete detenidos son marroquíes afincados en Collado Villalba, de entre 21 y 44 años de edad, que cuentan entre todos ellos con 17 detenciones previas por delitos contra el patrimonio, contra la salud pública, malos tratos y una agresión sexual.

Esta intervención ha permitido esclarecer, además, un delito de robo con fuerza en interior de vehículo, ocurrido el pasado día 23 de septiembre de 2010 en Collado Villalta, cometido por uno de los integrantes del grupo ahora detenido.

A los detenidos se les acusa de los delitos de robo con fuerza en las cosas y receptación, y a uno de ellos se le imputa además un delito de falsificación de documentos, ya que se dedicaba a emitir documentación falsa a compatriotas con la apariencia de documentación legal de su país.