Paralizado otro desahucio en Madrid, pero con polémica
El colectivo 15-M ha conseguido evitar el desalojo de una mujer que llevaba 10 meses sin pagar el alquiler. El casero no entiende la situación: "Ahora el indignado soy yo"
En este caso se trataba de un desahucio por impago. Finalmente los 'indignados' han conseguido que Susana tenga días más de plazo para abandonar el piso y buscarse un sitio donde vivir
Un grupo de casi medio centenar de ''indignados'' consiguieron este martes aplazar por dos días la orden de desahucio de una inquilina que adeuda once meses al propietario de la vivienda impidiendo el acceso a las dos secretarias judiciales que acudieron a la casa para hacer efectivo el abandono del piso.
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En declaraciones a los medios frente al portal de la vivienda, la inquilina, Susana García, después de que las secretarias judiciales le comunicaran que el desahucio se aplazaba al próximo miércoles a las 9.30 horas, lamentó que "no es justo" y que intentará recurrir la decisión para conseguir un plazo de "quince días" para poder reorganizar su vida.
Así, visiblemente emocionada y frente a las decenas de ''indignados'' que le escuchaban y aplaudían desde el portal de la vivienda, Susana, licenciada en Arte Dramático, argumentó que se encuentra actualmente en paro, aceptando trabajos temporales, e intentando "pedir créditos" para poder hacer frente al dinero que adeuda. "Se me cae la cara de vergüenza de salir en los medios por morosa", lamentó.
Además, denunció que el propietario del piso le ha enviado "amenazas de muerte" y ha contratado a "un detective" para seguirle durante un mes. "También pidió presupuesto a unos rumanos para abrirme la cabeza", aseguro la inquilina.
El propietario, "viviendo de prestado"
Mientras, el propietario de la vivienda, Luis Valdecantos, que tiene contratada una hipoteca de 1.100 euros al mes por esta casa y le faltan 30 años para liquidarla, lamentó que ha tenido que irse a vivir "de prestado con un amigo" porque ya no puede hacer frente al piso en el que vivía de alquiler.
Además, negó que haya habido "ningún tipo de amenazas" por su parte, ni que haya contratado a un detective para su seguimiento, si no que afirmó que siempre ha seguido el procedimiento legal que hoy habría hecho que Susana desalojara la vivienda y él pudiera entrar a vivir en ella. "Son cuentos chinos de ella", apostilló.
Por ello, lamentó que los ''indignados'' se hayan posicionado de parte de la inquilina cuando él, según reconoció, se encuentra en "peor" situación que Susana. "Que se busque la vida como yo", le reprochó.
"Con 80 personas es suficiente"
Por su parte, el portavoz de Democracia Real Ya en Madrid y colaborador de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, Eduardo, aseguró que el movimiento intentará estar "en los máximos posibles" desalojos que se celebren en Madrid para "garantizar el derecho a una vivienda digna".
Así, indicó que "con 80 personas es suficiente" para, de manera "pacífica", evitar que se pueda llegar a producir la orden de desahucio. "Desde Democracia Real Ya vamos a dar difusión y les vamos apoyar", concluyó.