El fiscal rebaja a cuatro meses la petición de cárcel para los estudiantes que asaltaron el Rectorado

Visto para sentencia el juicio contra los 23 estudiantes que entraron en el rectorado para protestar por la Ley Orgánica Universitaria y acabaron rompiendo puertas del siglo XVIII. La Fiscalía de Sevilla ha modificado su escrito de acusación y ha pedido cuatro meses de cárcel por un supuesto delito de desórdenes públicos.

Los acusados, según el escrito del fiscal, llevaban palanquetas, extintores y barras de hierro. Forzaron una primera puerta, causándole grandes desperfectos y "golpearon indiscriminadamente a los vigilantes jurados de la Universidad que trataban de impedirles el paso".

Para el Ministerio Público, el grupo continuó avanzando y fracturó dos puertas más antes de acceder al despacho del rector, "donde realizaron pintadas en la moqueta y destrozaron el entelado de la pared". Posteriormente, los jóvenes supuestamente se dirigieron hacia la Sala de Juntas, donde estaba reunida la Junta de Gobierno de la Universidad, y "tras golpear y arrollar a los vigilantes jurados, rompieron la puerta de la sala y accedieron al interior" por lo quetuvieron que interrumpir la reunión.

La Fiscalía también solicita para los estudiantes una multa de ochocientos euros y una indemnización solidaria de más de 37.000.