Gallardón juega a por todas

Lleva años entrenándose para la política nacional y por fin, consigue llegar al Congreso, como numero cuatro de Mariano Rajoy. Su estrategia de los últimos años, en los que se ha puesto de perfil para evitar enfrentamientos con Esperanza Aguirre, le ha sido rentable en Génova.

El alcalde respira aliviado, porque no ir en esta lista hubiera sido para él todo un drama, después de la intentona fallida de las últimas elecciones, y del lío que se montó en el partido. Dicen que Gallardón ha aprendido del que fue, según sus propias palabras, su peor momento político.

Entra al Congreso por la puerta grande, como aliado de Rajoy, pero, no quiere hacerlo sólo y espera poder contar con su fiel escudero, el vicealcalde madrileño Manuel Cobo, a quien Génova busca un hueco. Eso sí, fuera de la lista de Madrid, donde la presidenta regional Esperanza Aguirre le tiene vetado, tras los duros enfrentamientos que ambos protagonizaron con el escándalo de los espías.

Gallardón se mete de lleno en la política nacional, aunque sus colaboradores dejan claro que ésto no garantiza que Rajoy, en caso de ganar las elecciones, le incluya como ministro de su gabinete...aunque las quinielas ya se han disparado. Se le colocan todo tipo de carteras: la de ministro de Fomento, de Justicia, de Interior. Incluso, fuentes del partido le sitúan ya como presidente del Congreso, aunque su equipo le ve en un papel más político y menos institucional.

Y a todo ésto, ¿Qué dice Esperanza Aguirre? Pues, en principio, que acata las decisiones del partido, aunque no le guste ver a su eterno rival colocado en la meta de salida.

El cuento, cuatro años después, ha cambiado mucho.