Alquilo piso. Abstenerse inmigrantes
Radio Bilbao acompañó como observador a SOS Racismo y CEAR en el testing que demuestra que a los inmigrantes sólo se les ofrece el 25% de la oferta de pisos de alquiler
Las dos asociaciones han demostrado la discriminación que sufren los inmigrantes en Euskadi a la hora de intentar alquilar un piso. Divididos en 7 grupos, cada uno formado por tres ganchos, uno bilbaino, un subsahariano y una persona del norte de Africa, han entrado a un total de 29 inmobiliarias en Bilbao. Mientras que a los autóctonos se les ofertaron 105 pisos, a los subsaharianos sólo 22 y 23 a los magrebíes.
SOS Racismo y CEAR llevaron a cabo este testing el pasado viernes por la tarde. Divididos en 7 grupos se dedicaron a entrar en 29 inmobiliarias de diferentes zonas de Bilbao para poner al descubierto las dificultades que los ciudadanos inmigrantes se encuentran a la hora de encontrar piso. Grupos formados por un coordinador y tres ganchos. Tres chicos de edad muy similar pero diferente origen, uno de Bilbao, otro subsahariano y otro del norte de África. En uno de estos grupos estuvo también Radio Bilbao como observador.
El método
Cada uno de los 7 grupos entró a un mínimo de 4 inmobiliarias de la zona que tenían asignada. Guardando las distancias y en diferentes momentos de la tarde los tres jóvenes pasaban por cada una de estas inmobiliarias solicitando un piso de alquiler que rondase los 950 euros al mes. Después de cada intento se apuntaba la respuesta, el número de pisos ofertado, el trato y los requisitos o información que se les hubiese pedido.
Los resultados
Tras la puesta en común de todos los grupos los resultados hablan por sí solos. Mientras que a los jóvenes autóctonos se les ofertaron un total de 105 pisos, a los ciudadanos subsaharianos sólo 22 y 23 a los magrebíes o argelinos que participaron. Además sólo en una de las 29 inmobiliarias se ofertó a las tres personas los mismos pisos. Tampoco el trato fue el mismo, en muchas ocasiones se pidió procedencia o se preguntó si tenían trabajo a los ciudadanos inmigrantes, algo que no ocurrió con los jóvenes bilbainos. En otras ocasiones las inmobiliarias se excusaban alegando que los propietarios del piso no lo alquilaban a extranjeros o se aducía no tener alquileres por debajo de los 1.200 euros, una situación que cambiaba radicalmente cuando el solicitante era autóctono.
Conclusiones
Sos racismo y CEAR dan por probado que la experiencia pone de manifiesto que los inmigrantes son discrminados en nuestras inmobiliarias a la hora de buscar alquileres y por esta razón mucho prefieren alquilar habitaciones. Ambas organizaciones trabajan ya en un manual de buenos usos para entregar a estos comercios.
Tras pasar por 29 inmobiliarias en diferentes momentos de la tarde los 7 grupos




