Otra mañana de paros, la cuarta en un mes y medio

El Gobierno vasco ha decretado los servicios mínimos habituales en las últimas jornadas de movilizaciones. Se establecen en el 30% para las tres horas de paros, es decir, a priori circulará uno de cada tres trenes. La dirección ha asegurado que se tratará de prestar el máximo servicio posible, en función del seguimiento que tenga el paro entre su personal y respetando la orden de servicios mínimos.

Es una vuelta de tuerca más a una situación que se tensa cada día. Lo último las declaraciones que el propio consejero de Interior realizó en Radio Bilbao estableciendo un paralelismo entre el comportamiento de los sindicatos del suburbano con los controladores aéreos, y calificando su actitud de "mafiosa". También el alcalde Iñaki Azkuna ha asegurado que la huelga de 24 horas planteada para el día de Santo Tomás es "humillante". Pese a que las posturas son distantes ambas partes se reunirán esta misma semana. El Departamento de Empleo ha concertado un encuentro para este jueves a las 9.30 horas entre la dirección y el comité de huelga. Será una de las últimas oportunidades para salvar el previsible caos de un Santo Tomás sin servicio de metro.