El show «Alegría» es uno de los más reconocidos. Muestra de ello es que lleva más de 15 años girando por todo el planeta. Tanto si han asistido a alguno de sus espectáculos como si no, en el imaginario colectivo está el color del vestuario y maquillaje de unos artistas cuya destreza en las diferentes disciplinas deja con la boca abierta a todo tipo de públicos allá donde van. Sobre el escenario se van cruzando malabaristas, acróbatas, gimnastas, contorsionistas o bailes de fuego y cuchillos. No faltarán los payasos, obviamente los encargados de dotar del toque de humor a la obra. La banda sonora está compuesta por René Dupéré suena al ritmo de los juegos de luces. La compañía canadiense se creó en 1984 y define su montaje como «dramático y de esparcimiento callejero», de hecho, sus fundadores son dos artistas callejeros Daniel Gauthier y Guy Laliberté. Desde entonces ha revolucionado el concepto tradicional del circo, que no sólo se ha subido a la vanguardia de las artes sino que tiene su lado reinvindicativo. En este caso, «Alegría» plantea una reflexión sobre el mal uso que se le da al poder desde las monarquías o las dictaduras y cómo esas artimañas de unos tiranos acaban perjudicando a los ciudadanos. Repasa la historia de la Humidad desde ese punto de vista. En escena se van intercalando bufones, reyes e incluso se atreve a mirar al futuro. Las entradas cuestan entre 30 y 65 euros. Funciones del 18 al 22 de enero en el Bilbao Arena.