La matanza de Atocha, hoy en el recuerdo de Madrid

Hace 35 años, cuatro abogados laboralistas y un sindicalista eran asesinados en un despacho de la calle Atocha. En su honor, se levanta una escultura de Juan Genovés que reproduce su famoso cuadro "El abrazo", desde hace casi una década durmiendo el "sueño de los justos" en los sótanos del Museo Reina Sofía hasta su definitivo "rescate", a finales de marzo. A los pies de esta escultura icónica, se ha vuelto a recordar que las leyes pueden perdonar crímenes pero no borran la memoria de aquellos que aún viven y resisten el olvido, la de aquellos que creen esencial mantener viva la Historia.

Para que la memoria de los abogados perviva, además, la Fundación Abogados de Atocha ofrece unos premios anuales que, esta vez, quieren honrar al economista, profesor y literato José Luis Sampedro quien, en palabras del exrector Carlos Berzosa, es un referente en estos tiempos de pensamiento único en el que "las matemáticas han tomado el control de la ciencia económica".

La Fiscalía General de Guatemala también ha sido premiada en la persona de Claudia Paz y Paz, en el punto de mira de los militares de su país por haber recuperado la confianza de sus conciudadanos en la Justicia, vencido la impunidad y sentado a algunos genocidas en el banquillo de los acusados. En realidad, por haber demostrado en tan sólo un año que es posible hacer Justica en Guatemala.

Y así, todos los participantes en la entrega de premios creen paradójico que la entrega del galardón se produzca justo el mismo día en el que quien comenzó a investigar en España esos crímenes contra la humanidad, tenga que responder ante la justicia por intentar esclarecer los crímenes de la dictadura franquista.