Carabanchel sufre un terremoto de 1,8 grados
El pequeño temblor ha tenido una profunidad de 11 kilómetros, por lo que no ha producido ningún incidente
Madrid
Mínimo, sin consecuencias que lamentar pero con una anécdota que contar. Carabanchel ha sido, esta madrugada, el epicentro de un terremoto de tan solo 1,8 grados en la escala de Richter.
"Ha sido mínimo, casi imperceptible pero los vecinos ya pueden decir que han vivido un terremoto", afirma con tono orgulloso el presidente de la Junta de Distrito. Según él, no consta que el vecindario se haya enterado pero el director del Instituo Geográfico Nacional Emilio Carreño asegura que sí ha habido quien lo ha notado y no le extraña. "Con la quietud de la noche, si alguien está sentado en una silla en los primeros pisos de un edificio, puede notar que se mueve la silla o la mesa", explica.
No solo la magnitud es importante para medir la gravedad de un terremoto, sino también su profunidad. En algunos casos, los sismógrafos detectan movimiento debido a una explosión o un concierto pero es la profunidad la que determina si es un terremoto o no. "En el primer caso, es una onda muy fuerte donde va concentrada toda la energía y en el segundo caso, generalmente es un pequeño impulso, luego otro mayor seguido de multitud de ondas posteriores", detalla el director. En el de hoy, los 11 kilómetros de profundidad del terremoto de esta madrugada demuestra que es muy superficial.
Los madrileños pueden estra tranquilos. Madrid es de las comunidades que menos terremotos registra. El primero fue en 1756 y desde entonces, ha habido 24. "Ha habido algunos en Galapagar, que tiene una falla en la vaguada donde hay un torreón pero quizá el lugar con mayor actividad sísmica de Madrid es San Martín de la Vega donde en 1954 se registró uno de cuatro grados, se cayeron estanterías pero poco mas", según datos de Carreño.
