Los ladrones no dejan descansar en paz
"Son significativos emocionalmente porque para una persona que viene a visitar a un familiar es triste ver qué han robado algo de la tumba", explica el jefe de cementerios de Madrid
(CAROLINA GÓNGORA)
Madrid
El cementerio de La Almudena ha sufrido en los últimos meses entre 20 y 30 robos
Una silueta de óxido en forma de cruz, dos marcas de tornillos o una lápida sin una de sus esquinas. Estas son algunas de las muestras que prueban que ha habido robos en el cementerio de La Almudena. "Han sido 20 o 30 robos y no son significativos económicamente sino emocionalmente porque para una persona que viene a visitar a un familiar es triste ver que han robado algo de la tumba", detalla Agustín Mezcua, jefe de los 13 cementerios de Madrid. "Nos han robado algunas lápidas que no sabemos para qué pueden servir, cables eléctricos que estaban empotrados en el suelo en las tuberías, y Cristos y asas de bronce que sí pueden venderse fácilmente", añade el jefe.
Agustín Mezcua, jefe de los cementerios de Madrid, admite que siempre ha ocurrido pero que ahora con la crisis ha aumentado aunque destaca que son casos aislados. Desde la Federación de Trabajadores de la Seguridad Privada achaca este incremento a la reducción de personal de seguridad. "Ahora hay 23 personas de 55 que había, se han sustituido por cámaras y lo denunciamos porque hay recortes donde no hay problemas económicos", aclara Rafael Saldaña. Mezcua, no obstante, insiste en que tienen la misma seguridad de antes y que las cámaras han ayudado a reducir los robos. "Tenemos seguridad armada 24 horas, personal de seguridad en zonas sensibles, donde hay gran afluencia de gente, y un dispositivo de videovigilancia muy importante". Estas cámaras demuestran que los robos se cometen a la luz del día. "Aquí entra mucha gente a lo largo del día, incluso hay personas que hacen footing y es imposible cubrir todo el territorio". Este cementerio es uno de los más grandes de Europa, alberga 180.000 enterramientos de los 350.000 totales que hay en Madrid.
En el cementerio no se avisa de estos incidentes porque, según Mezcua, no saben qué decoración pondrán. "Animo a los familiares a no tener miedo a estos casos porque estamos invirtiendo mucho en solucionar este problema", concluye.
