Los muchos kilómetros de la ciudad del subsuelo

La red de galerías y colectores de Madrid tiene una longitud de 4.780 kilómetros, que se extiende por toda la ciudad, y es objeto de vigilancia por la Sección Operativa de Subsuelo

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La Brigada del subsuelo que debe velar por la seguridad de más de 4.500 kilómetros de alcantarillas, galerías del siglo pasado, sumideros y otras canalizaciones. Esos miles de kilómetros rozan la distancia que separa la capital de Moscú.

Y entre las amenazas permanentes de gases tóxicos, subidas del nivel freático o infecciones, los agentes buscan y localizan a los butroneros del subsuelo: delincuentes venidos a menos porque se precisa un alto nivel técnico para perforar desde las alcantarillas.

Hace unas semanas, una entidad bancaria de la avenida de la Albufera sufrió la visita de los cacos. Allí llegaron también los policías.

Los cacos conocían a la perfección la red de alcantarillado del barrio de Vallecas. De esta forma lograron perforar en la vertical de la entidad bancaria accediendo a un sótano que hacia las veces de archivo. Y ya estaban dentro.

En los últimos diez años los agentes del subsuelo ha detectado e investigado 9 butrones: operaciones de robo muy bien planificadas por lo que los presuntos responsables son pocos y viejos conocidos de las policías profesionalidad como ladrones les delata y facilita la detención.

Este descenso a las profundidades ha tenido parada obligada en la plaza de la Lealtad. A 10 metros bajo el suelo se ven los cimientos de la bolsa y sus sumideros que siguen fluyendo a pesar de la crisis.