El sector del metal en Bizkaia destruyó 1.800 puestos de trabajo el año pasado

El sector del metal, pieza clave en la economía bizkaina con más de 51.000 asalariados, prosigue su larga travesía por el desierto. La memoria de actividad de 2011 deja un decrecimiento de la actividad del 5%, la destrucción de 1.800 puestos de trabajo y el cierre de medio centenar de empresas

"Estamos inmersos en la peor crisis de los últimos decenios", apuntaba el presidente de la Federación de Empresas del Metal (FVEM), Jose Luis López Gil. Este año, reconocía, no hay indicios que apunten hacia la mejora, "va a ser parecido", concluía. De hecho, según una encuesta realizada entre los asociados, un tercio de las compañías tienen previsto recortar sus plantillas y hasta un 73% advierte que no tiene previsto realizar inversiones en los próximos meses.

Sin embargo, a partir de varios indicadores la patronal trata de ver el vaso medio lleno. Uno de ellos es la "menor angustia financiera" de las empresas de mayor tamaño. Otro es que dos subsectores, el de materiales de transporte y la industria siderúrgica, empiezan a asomar la cabeza. Con todo, lo que tienen claro los máximos representantes de los empresarios es que el futuro está en el mercado exterior. "Ante un mercado interno inexistente, la presencia internacional nos está permitiendo resistir con cierta solidez". La apuesta de FVEM, en ese sentido, son las alianzas estratégicas -"no fusiones", matizaban- entre empresas para fortalecer su capacidad negociadora. No han concretado nombres, pero sí han admitido que hay algunos contactos, promovidos también desde la Diputación. Se trataría de fórmulas similares a las UTEs de la construcción, es decir, uniones temporales que permitan reducir costes y compartir conocimientos.