Diez familias más ocupan el edificio abandonado de San Lázaro
El inmueble está vacío desde 2010, tras quebrar la empresa propietaria. El 15M ha coordinado la entrada de más de una treintena de familias en situación de emergencia social en el edificio
Todas las viviendas están ya ocupadas. El 15M pedirá al Defensor del Pueblo Andaluz que medie para que estas personas puedan quedarse pagando una renta asequible.
Diez familias en situación de necesidad social que han perdido sus domicilios como consecuencia de la crisis económica han ocupado las viviendas que quedaban disponibles en el edificio de la avenida de las Juventudes Musicales de San Lázaro, un inmueble vacío en el que el pasado jueves se adentraron una veintena de familias para convertirlo en su hogar.
Estas familias se encontraban en una "lista de espera" elaborada por el colectivo del 15-M que buscaban una solución "inminente" a su problema. Con su incorporación al edificio, se han completado las 32 viviendas de este inmueble, que permanece "vacío desde el año 2010, cuando finalizó su construcción", tras quebrar la empresa propietaria, según los miembros del 15M.
La Policía han acudido al lugar para "controlar" la situación, sin que se haya requerido el desalojo del edificio, siempre según relatan las mismas fuentes. Por su parte, las familias instaladas en el bloque, varias de las cuales "cuentan con menores a su cargo o están afectadas por enfermedades crónicas o discapacidades graves", han elaborado unas "normas de convivencia" basadas en el diálogo y en el entendimiento.
Con esta iniciativa, el 15-M pretende no sólo dar solución puntual a la situación de estas familias que han sido desahuciadas, que tienen una fecha de lanzamiento inminente o que no han podido hacer frente al alquiler; sino abrir nuevas vías de debate para ofrecer respuesta a todas las familias a las que la crisis ha puesto en peligro su vivienda.
Por su parte, el Defensor del Pueblo Andaluz, José Chamizo, se ha comprometido con una parte de estas familias a mediar con las administraciones.
HISTORIAS DE LAS FAMILIAS
El portal web de la Corrala de Vecinas ''La Utopía'', creado expresamente con motivo de esta iniciativa, relata algunas de las historias de las mujeres que encabezan estas familias que han perdido sus hogares. Así, cuenta que Manoli tiene 65 años y que, tras toda una vida trabajando como limpiadora, ahora se ve en la calle. "No pudo afrontar el pago de la hipoteca aunque lo intentó por todos los medios, de modo que perdió sus ahorros, incluso el plan de pensiones".
"Vanessa está casada, tiene 32 años y tres hijos a su cargo, uno de ellos con síndrome de down. La empresa en la que trabajaban ella y su marido quebró, dejándoles a deber una importante cantidad económica que no van a cobrar hasta dentro de varios años. No pudieron afrontar los pagos de su piso. Envisesa les exige para acceder a una vivienda social que liquiden las deudas que tienen. Sin embargo, ellos no pueden".
"Elena lleva tres años en el paro. Antes ha trabajado de todo: peluquería, cajera de supermercado, limpieza, etcétera. Ella y su pareja, que también perdió el puesto de trabajo en plena crisis económica, viven con su madre y no tienen posibilidad de tener una vivienda. Ha solicitado un piso de protección de alquiler pero no cumple los requisitos mínimos porque no tiene trabajo y para recibir ayudas te exigen tener un trabajo".
"Toñi tiene 44 años y un hijo de 12 a su cargo. A finales de septiembre perdió su empleo y se quedó además sin paro ni ayudas. En cuanto dejó de pagar Emvisesa la metió en un juicio, en el que, además del dinero que debe, habrá de pagar las costas judiciales. Denuncia que en la manzana en la que vive hay 30 pisos vacíos víctimas de familias que han sido desahuciadas. Reclama un alquiler que en su situación pueda pagar".




