Cavero anuncia una subida del 17% en el uso del abono turístico
En lo que va de 2012 ha habido una caída, entre 4 y el 6%, en el uso de transportes públicos.
El Consejero de Transportes señala que las usuarios se están adaptando al billete sencillo: "Los madrileños poco a poco van entendiendo que ya no es lo mismo recorrer 4 estaciones que 14. Los usuarios que utilizan el sencillo son pocos, es un uso marginal. Pensamos que la experiencia es favorable y vamos cambiando los hábitos"
Los madrileños ya se han adaptado al nuevo billete sencillo, según ha asegurado esta mañana el Consejero de Transportes, Pablo Cavero.
Este ticket empezó a funcionar en mayo, supuso una subida de hasta 2 euros en cada viaje, y ha hecho un poco más complicado obtenerlo en las máquinas expendedoras de las estaciones.
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Cavero señala que la experiencia está siendo favorable: "Los madrileños poco a poco van entendiendo que ya no es lo mismo recorrer 4 estaciones que 14. Los usuarios que utilizan el sencillo son pocos, es un uso marginal. Pensamos que la experiencia es favorable y vamos cambiando los hábitos"
En lo que va de 2012 ha habido una caída, entre 4 y el 6%, en el uso de transportes públicos. En contraste con la subida del 17% de la compra de los abonos turísticos. El 80 % de la venta de este tipo de billetes se hace en las máquinas expendedoras del metro y desde el suburbano esperan ampliar la venta a cadenas hoteleras o compañías aéreas.
El Consejero ha destacado al turismo de negocios, como uno de los que más dinero deja en la Comunidad, y a los que hay que intentar incorporar al uso de este abono. "El balance del primer semestre de 2012 es satisfactorio, hemos facturado más de 300.00 billetes turísticos, significa un crecimiento del17% desde el 2011. A pesar de la crisis vemos que el turismo aguanta, y sobre todo el internacional".
Estos billetes turísticos se crearon en 2004 con el objetivo de que los visitantes puedan desplazarse entre 1 día y una semana por la zona A o la zona T, que incluye toda la Comunidad y las regiones exteriores de Castilla La Mancha.
Desde la Conserjería esperan que este abono turístico contribuya a reducir el déficit anual del Metro, que cada año asciende a 800 millones de euros.