Otra vez el mágico 90, otra vez Rubén Castro

El Betis volvió a mostrar carencias, hizo un pésimo encuentro, aunque no le faltaron oportunidades a lo largo del choque

Rubén Castro es un seguro de vida para el Betis. El gol de ayer será uno de los más tontos de la Liga, pero, como casi siempre, qué casualidad, resolvió Rubén. Al final, en el minuto 90, con fallo clamoroso del portero local y enorme acierto del asistente, pero un nuevo gol que vale tres puntos. Otra vez el mágico minuto 90 y otra vez Rubén Castro. La temporada pasada fue el jugador más decisivo con sus goles en partidos que acabaron uno a cero. Nadie sabe por qué, pero este Betis de Pepe Mel nunca pasa desapercibido. Ni tan siquiera el día que aburre a todos. Le gusta vivir en el filo de la navaja y, hasta el último suspiro, todo puede ocurrir. En el minuto 90, nadie puede dejar de ver al Betis. Algo ocurre siempre y, en Valladolid, para gozo verdiblanco.

No obstante, la victoria balsámica del Betis no debe ocultar las dudas y los problemas que evidencia el juego verdiblanco. De inicio, con problemas en las bandas y en el centro, con Nono desubicado y con Beñat sin oler el balón. Cierto es que el Valladolid es un equipo que toca mucho en zonas lejanas, con poca profundidad, pero la pasividad bética le hizo pensar en posibilidades de victoria. También es cierto que el Betis, en una pésima primera parte, tuvo varias llegadas con peligro. Dos de ellas con protagonismo para Agra, que mejoró, pero no despeja las dudas.

En la segunda parte no hubo una mejoría evidente. La presencia de Nosa por Nono no mejoró demasiado. El nuevo fichaje bético salió con los tacos equivocados y sus continuos resbalones lo sacaron del partido. Sin embargo, sí hubo un movimiento fundamental de piezas: Rubén Castro fue devuelto a su posición natural. En punta, tuvo una oportunidad y resolvió en la segunda. Antes, Casto sacó como pudo un cabezazo de Ebert y Manucho complicó la vida más de lo debido a una defensa que hizo aguas an las bandas y estuvo más segura en el centro.

Los puntos siempre son bienvenidos, pero no deben ocultar la realidad. El Betis estaba a punto de vivir la primera tormenta de la temporada, con cuatro refuerzos en Sevilla, y la victoria sirve para que todos sientan que tienen crédito. Mel vuelve a tener trabajo pendiente. Entre otras cosas, meter en la dinámica a los nuevos. De esta forma, todo el mundo será feliz y los problemas no crecerán. Por supuesto, si los resultados siguen acompañando.

FICHA TÉCNICA

Valladolid: Jaime; Rukavina, Rueda, Marc Valiente, Balenziaga; Ebert, Rubio (Sastre, min. 61) Víctor Pérez, Omar (Bueno, min. 83); Óscar y Guerra (Manucho, min. 73).

Betis: Casto; Nelson, Mario, Paulao, Nacho; Beñat, Rubén Pérez; Agra (Alex min. 63), Nono (Nosa, min. 58), Rubén Castro; y Jorge Molina (Pereira, min. 70).

Gol: 0-1: Min. 89, Rubén Castro.

Árbitro: Delgado Ferreiro (Comité Vasco). Amonestó a Paulao, Sastre y Pereira.

Incidencias: Estadio José Zorrilla. 13.600 espectadores.