Callao aplaude la decisión de Borrás

Desde que se conoció la supuesta implicación de José Borrás el pasado martes en la operación Emperador la dirección del partido se situó en posición de alerta y asumió que tenía que mover ficha en el caso de que el juez determinara, finalmente, su imputación. Tomás Gómez dijo que iba a ser contundente.

Con la decisión de poner sus cargos a disposición del partido, Borrás se anticipa a las posibles actuaciones de Callao que tenía claro, después de la declaración judicial, que había que suspender a Borrás cautelarmente de militancia, lo que llevaba implícito que dejara su acta de concejal.

En la sede de los socialistas madrileños agradecen que Borrás se haya adelantado. Para Tomás Gómez lo más importante era no hacer daño a la institución, al Ayuntamiento de Fuenlabrada, gobernada por uno de los suyos, pero tampoco al partido, al PSM.

Hay dirigentes del PSM que consideran que la decisión es injusta, puesto que el hecho de que el juez haya dejado en libertad sin fianza a Borrás atenúa, en parte, la acusación que pesa sobre él. Creen que suspenderle cautelarmente es colocarle en el disparadero y ponerle una cruz, donde se emita ya sentencia pública.

Aún así, todos coinciden en que es la mejor salida: Borrás se va y prepara mejor su defensa y el PSM queda limpio de polvo y paja. Nadie puede decir, dicen en el entorno de Gómez, que al PSM le haya temblado el pulso en éste tema.

En todo momento Gómez ha estado en contacto con el alcalde de Fuenlabrada, Manuel Robles, para que la decisión que se tomara fuera consensuada.