Los presupuestos de la Junta para el 2013 caen un 4,1% hasta los 30.707 millones de euros
El Gobierno de coalición PSOE- Izquierda Unida aprueba sus primeros presupuestos que ya han llegado al Parlamento
El presupuesto de la Junta vuelve a niveles de 2007. El año que viene la administración autonómica contará con 30.706 millones de euros, un 4,1 por ciento menos que el aprobado inicialmente en 2012, antes del recorte de junio de 2.500 millones de euros. Así, el nuevo presupuesto supone un recorte adicional de 400 millones de euros
La Junta prevé una caída de la economía andaluza para el próximo año de un 1,2 por ciento, y para paliar la caída de los ingresos pondrá en marcha un plan de lucha contra el fraude fiscal. No habrá nuevos impuestos.
En el capítulo de gastos, las consejerías contarán con 10,7 por ciento menos. Significativo es el recorte de la inversión pública: un 20 por ciento. No habrá obra nueva porque se priorizan otras políticas: el empleo y las sociales.
En este sentido, el gobierno andaluz define sus primeros presupuestos de coalición como "cuentas de resistencia y contraste". La consejera de Hacienda, Carmen Martínez Aguayo, garantiza también que estas cuentas cumplirán con el objetivo de déficit del 0,7 por ciento. La Junta se endeudará en mil millones de euros más (el máximo permitido), y el pago de los intereses de la deuda se llevará 2.500 millones.
SE REDUCE EL PRESUPUESTO PARA TODAS LAS CONSEJERÍAS
Todas las consejerías contarán con menos recursos el año que viene. El mayor tajo lo sufrirá Turismo (pierde hasta un 36 por ciento), y le sigue Cultura y Deporte, y en tercer lugar Hacienda.
La Junta ha priorizado en el reparto del gasto el empleo y las políticas sociales. Habrá así 370 millones de euros para planes laborales dirigidos a desempleados sin recursos. Las becas aumentan un 7 por ciento, la renta básica un doce por ciento y las pensiones asistenciales un dos. El objetivo de la Junta, como decíamos, es mantener los servicios público, y por ello no habrá más guarderías ni nuevos hospitales, pero garantiza que se mantendrán lo que hay actualmente.
El gasto en personal público descenderá un 8 por ciento, pero no por nuevas medidas sino por las ya aprobadas en el último plan de ajuste, igualmente para el sector público empresarial. Las empresas del sector público que prestan servicios sociales contarán con un 7 por ciento menos de financiación, y el resto un once por ciento.
La voluntad de la junta sigue siendo mantener el empleo público, pero dónde aplicar este ajuste corresponderá a cada una de las empresas.
El proyecto de ley de presupuestos está ya en el Parlamento para iniciar su tramitación en la cámara.
