Goleada y a semifinales de Copa
En el mejor de los casos el Sevilla podría disputar dos títulos esta temporada
Sin hacer un juego brillante desbordó a un timorato Zaragoza que permitió a los delanteros sevillistas encontrar el camino del gol que no aparecía en las últimas jornadas
La Copa del Rey puede servirle al Sevilla para enderezar la temporada y si se da la mejor de las opciones posibles disputar dos finales en vez de una. La combinación sería posible, lógicamente pasando a la final, y si el rival fuera el F.C Barcelona. En ese caso el equipo de Emery disputaría el titulo de Copa al Barcelona y si los catalanes ganan la liga volverían a enfrentarse en la final de la Supercopa. Hay camino por andar pero la competición que tantas alegrías le ha dado a la institución en las últimas temporadas puede ser un acicate espectacular para cambiar la imagen del equipo. No tuvo rival en la eliminatoria y mejoró en la faceta goleadora. Noche redonda.
Y eso que la puesta en escena del Sevilla fue discreta dejando mandar de manera incomprensible al Zaragoza que a su forma vivió cerca del área de Diego López durante al primer tramo del partido. Dos faltas y dos corners consecutivos trasladó la zona de operaciones al campo rival. Un gran pase de Reyes dejó a Negredo mano a mano con Leo Franco y el delantero disparó al bulto fallando una ocasión inmejorable. El equipo de Jiménez intentaba no perderle la cara al partido pero en el momento en el que el Sevilla presionaba y robaba en ventaja se ponía fácil de gol. Rakitic sirvió otro balón extraordinario a Negredo que no llegó a rematar. Estas acciones puntuales no ocultaban la falta de ritmo del equipo de Emery cuyos vicios se eternizan sin nadie que los solucione. Velasco Carballo dejó al Zaragoza con diez expulsando a Fernández y allanando el camino para los cohibidos jugadores sevillista. La superioridad numérica no se notó demasiado en el juego y tuvo que ser en jugada a balón parado como el Sevilla pudo ponerse por delante en el marcador. Negredo remató de cabeza un saque de esquina de Rakitic para poner rumbo a semifinales. La pobreza del juego rival y el punto de intensidad que pusieron los pupilos de Emery en el tramo final del primer acto parecían suficiente para acabar con la eliminatoria. Por si fuera, poco Rakitic marcó en el descuento el segundo tanto sevillista, preludio de una plácida segunda mitad.
El equipo y los aficionados pudieron disfrutar de un partido cómodo, algo poco habitual en esta temporada tan complicada. Sin brillantez en el juego pero aprovechando las circunstancias favorables del partido la noche estaba para certificar la victoria. Unay aprovechó las circunstancias para dar minutos a Manu del Moral y empezar por algún sitio la reconstrucción que le han encomendado. Cicinho regaló una carrera sorteando rivales que terminó en penalti y segunda expulsión zaragocista. Negredo aumentó la cuenta desde los once metros. La aparición de Babá y Stevanovic en el encuentro fue el siguiente paso para ir metiendo a jugadores que llevan meses desparecidos e ir viendo que puede aportar el recién llegado. El tramo final fue un carrusel de llegadas sevillistas que sirvieron par que Manu del Moral engordara el marcador favorable.. Un partido tranquilo con pase a semifinales de Copa no se vive todos los días.




