Toxicología descarta la versión de Ortega Cano de que sólo se mojó los labios con champán
Afirma que la tasa de alcohol en sangre hubiese sido mayor si se le hubiera practicado la prueba en el momento del accidente
La directora del centro de Toxicología, María Luisa Soria, considera «imposible» que el imputado pueda dar una tasa de 1.26 gramos por litro de sangre si sólo se había mojado los labios con champán. Añade además que se encontraba en un proceso de eliminación de alcohol cuando se obtuvo la muestra
La prueba de alcoholemia que se le realizó a Ortega Cano tras el accidente ha centrando esta cuarta jornada de juicio. El resultado de 1.26 gramos por litro de sangre triplica la tasa establecida y la directora del centro de Toxicología, María Luisa Soria, lo ha ratificado y ha dicho que el acusado había consumido una cantidad considerable de alcohol. Ha descartado la versión de Ortega Cano de que se hubiera mojado los labios con champán porque tres vasos de esta bebida en un hombre de su peso dan como resultado una tasa entre 0.47 y 0.60. Ha señalado incluso que cuando se le extrajo esa muestra, dos horas y media después del accidente, el paciente estaba en proceso de eliminación de alcohol, con lo que probablemente si se le hubiera practicado una hora antes, la tasa hubiese sido superior. Asegura además que el tubo era el adecuado, que estuvo en todo momento refrigerado y que se cumplió la cadena de custodia desde que entró en el centro.
A preguntas de la defensa, ha reconocido la posibilidad de que un "shock" como que el que sufrió Ortega Cano o el contacto de una solución alcohólica con una herida abierta, en el momento de la cura, puede interferir en el resultado aunque desconoce hasta que punto.
Antes de llegar al centro de Toxicología, la prueba estuvo en el banco de sangre del hospital Macarena. El director de Hematología, Antonio Figueredo, ha asegurado que en ningún momento, ni en el banco de sangre ni en la cámara donde se depositó cuando la solicitó la Guardia Civil, estuvo fuera de control. Ha dicho que se cumplió la "cadena de custodia" establecida en el protocolo del hospital aunque desconoce cuál es el que se debe de seguir en una causa penal.
También ha declarado hoy el doctor Fernando Manuel González Llera, el autor de un informe encargado por la representación jurídica de la aseguradora del vehículo del imputado. Estima que la tasa que dio Ortega Cano a la hora del siniestro era muy superior, de 1.63 gramos por litro de sangre, si se tiene en cuenta que "cada hora baja 0,15". Con ese resultado, añade, tendría lo que se denomina una "embriaguez completa" y no tendría conciencia "ni de sí mismo ni de la situación en la que se encuentra". «Es muy propio la alteración de la vista», ha asegurado el doctor, quien ha añadido que en esa situación es normal que no viera el coche cuando circulaba por el carril contrario. Descarta que le diera un vahído, como aseguró el torero, y señala que en su opinión no se percató de la presencia del coche de Carlos Parra pero por el estado de "confusión mental" en el que se encontraba.




