El Museo Thyssen hace justicia con Pissarro, el fundador y maestro del impresionismo
Desde el 4 de junio hasta el 15 de septiembre presentará al público cerca de 80 pinturas del artista de origen antillano que marcó el inicio del movimiento pictórico a finales del siglo XIX

El huerto en Éragny (Camille Pissrro, 1896)(MUSEO THYSSEN BORNEMISZA)

La muestra presenta obras traídas de diferentes museos de todo el mundo con sus cuadros dedicados a los paisajes rurales y su última evolución hacia la pintura de grandes urbes y zonas industriales
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Cézanne llegó a decir de Camile Pissarro (Santo Tomás, Islas Vírgenes 1830-París 1903) que era 'humilde y colosal'. Fue su maestro y el de muchos otros impresionistas de un movimiento que él mismo inició con sus pinceladas más largas y su explosión de color sin olvidar los antecedentes pictóricos inmediatos de artistas como Coubert, Corot o Daubigny. Era el hermano mayor de los impresionistas y fue el único que participó en las ocho exposiciones que organizó el movimiento. Siempre se acercó a los pintores más jóvenes y, al mismo tiempo que les transmitía su técnica y conocimiento, asimilaba las nuevas derivaciones que esos jóvenes iban desarrollando como las de los llamados puntillistas. Aunque su influencia fue decisiva, su repercusión en el mundo del arte quedó un tanto eclipsada por figuras como Monet o Renoir.
El Museo Thyssen Bornemisza en Madrid presenta al público 79 pinturas ordenadas de forma cronológica. Pisarro fue un pintor de paisajes rurales que buscaba la esencia de esos ambientes en los lugares en los que vivió y pintó como Louvenciennes, Pontoise o Eragny en los que predomina la naturaleza sobre la figura de los campesinos. Por razones de salud y posiblemente económicas, se trasladó en el inicio de su vejez a la ciudad donde experimentó una renovación de su arte plasmando paisajes urbanos que figuran entre las mejores imágenes artísticas de la pintura al inicio de la modernidad. Cuadros de París como el boulevard de Montmatre, la Rue de Saint-Honoré con efecto de lluvia o el Puente de Charing Cross en Londres. También sus últimas obras dedicadas a paisajes industriales como las vistas de las manufacturas de algodón de Oissel .
El museo Thyssen ha emitido una nota de prensa a propósito de la exhibición en esta muestra del cuadro de su propia colección 'La Rue de Saint-Honoré con efecto de lluvia'. La obra sigue siendo reclamada judicialmente en Estados unidos por la familia judía Cassirer como objeto de expoliación del nazismo. Un juzgado de California ha sentenciado en contra de la familia que ya vendió en su día el cuadro y después indemnizada por el gobierno alemán con 120.000 euros. Todavía queda por resolver el último recurso, pero el Museo Thyssen confía en que finalmente la justicia estadounidense legitime la propiedad del cuadro adquirido por el barón Thyssen que ahora pertenece al Estado español.




