Nuevo contrato de limpieza de las calles de Madrid
El Ayuntamiento pretende reducir el gasto en los servicios de limpieza y mantenimiento de la ciudad. Asegura que el nuevo contrato permitirá ahorrar unos 600 millones de euros
Por primera vez la patronal y los sindicatos del sector creen que se verá afectada la calidad del servicio. Aseguran que ya se están produciendo despidos y afirman que si hay menos dinero, la plantilla será menor, por lo que las calles de Madrid seguirán estando sucias.
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Ya ha entrado en vigor el nuevo contrato de limpieza de las calles de Madrid que incluye jardinería, mantenimiento de parques infantiles y zonas de mayores. El Ayuntamiento dice llevar meses preparando unos acuerdos que unifican servicios y barrios con el objetivo de ahorrar en sectores como movilidad o recogida de basuras. Han agrupado en un sólo contrato los 39 que había hasta ahora y tendrá una duración de 8 años. Además el Consistorio ha dividido la capital en 6 zonas, cuando antes había 10.
El concejal de Medio Ambiente en el Ayuntamiento de Madrid, Diego Sanjuanbenito explica que van a dar un buen servicio de mayor calidad todavía a todos los madrileños pero ahorrando en recursos que son de todos. Y añade que en los años de vida del contrato el Ayuntamiento se va a ahorrar más de 600 millones de euros, es decir 79 millones al año.
Las compañías que han ganado las contratas deben adaptarse a los nuevos criterios que les impone el Consistorio. Si éste no queda conforme con el servicio, puede pagarles hasta un 20 por ciento menos de lo acordado.
Patronal y sindicatos aseguran que el servicio perderá calidad. Explican que con el dinero del canon no habrá ni para pagar las plantillas al completo por lo que tendrán que despedir a trabajadores, algo que dicen ya está pasando.
La oposición
Diego Cruz, portavoz adjunto del Partido Socialista en Madrid, se queja de que el Ayuntamiento quiera ahorrar despidiendo a los trabajadores. Insiste en que al haber menos dinero, y por consecuencia, menos personal, la limpieza de las calles de la ciudad se verá afectada.
Raquel López, concejala de IU en Madrid, dice que el Consistorio no ha exigido a las empresas adjudicatarias un número mínimo de trabajadores, algo que le parece gravísimo, ya que las compañías van a decidir prescindir de los empleados. Aseguran que según sus cálculos más de 1.000 trabajadores se van a ir a la calle.
