Los vecinos de Ofelia Nieto presentan a "Cobri", la mascota no oficial de Madrid 2020

En torno a un centenar de personas se concentró este viernes frente a la puerta principal del Ayuntamiento madrileño para protestar contra el desalojo y derribo de una vivienda en la calle Ofelia Nieto del barrio de Tetuán. Acudieron con una propuesta de mascota para la candidatura Madrid 2020, "Cobri", en clara alusión a los sobres con dinero que supuestamente recibieron algunos miembros del PP implicados en la trama Gürtel.

En torno a las 12 de la mañana de este viernes la puerta principal del Ayuntamiento de Madrid comenzó a llenarse de policía. Hasta 7 furgones y una treintena de policías se desplegaron para impedir que una manifestación, que entonces cruzaba la plaza de Cibeles, llegara a entrar en el Consistorio. Al frente de la misma iban los inquilinos de una vivienda en la calle Ofelia Nieto número 29, que corre el riesgo de ser demolida en los próximos días. El inmueble, situado en el madrileño barrio de Tetuán, pertenece desde hace más de 50 años a sus habitantes y ahora el Ayuntamiento encabezado por Ana Botella se propone derribarlo para, según dicen, ampliar una acera prevista en el Plan Urbanístico municipal de 2004.

Ángeles Gracia encabezaba la marcha de un centenar de personas, también su hijo que, vestido de sobre gigante, representaba la que ellos proponen como nueva mascota de la candidatura a los Juegos Olímpicos de Madrid 2020, "Cobri". La idea es una parodia de los autores de la protesta en alusión a los supuestos sobres con dinero recibidos por algunos cargos del PP y que, según denuncian los manifestantes, la empresa encargada del derribo entregó al ex portavoz adjunto y diputado del PP, Jesús Merino.

Cuando la protesta llego a la puerta del Consistorio, los asistentes comenzaron a hacer ruido y a gritar consignas como "Botella dimisión" o "la botella al contenedor" ante la imposibilidad de entrar en el edificio. Gracia, megáfono en mano, leyó entonces un comunicado para denunciar lo que ella y su familia consideran un atropello inadmisible por parte de las autoridades municipales. En su rostro se veía el enfado y los nervios provocados por la situación, su voz se quebró en varios momentos por la emoción. Sin embargo, afirmaba "cada día estamos más fuertes y tenemos muchos apoyos, tenemos que luchar".

Antes de terminar la concentración, un autobús turístico se detuvo cerca del lugar y desplegó en uno de los laterales una pancarta de apoyo a los afectados y que intentaron arrancar los policías allí apostados. Fue entonces cuando se produjo el único forcejeo entre manifestantes y agentes, que se saldó sin mayores consecuencias.

Con la protesta de hoy comienza una carrera contrarreloj para la familia Gracia. La policía tiene orden de ejecutar el desalojo antes de que termine el mes de agosto. Si ese plazo acaba, el Gobierno municipal se verá obligado a cursar una nueva orden de desalojo con la correspondiente espera de varias semanas, según fuentes de la Asamblea de Vivienda de Madrid.