Toca hablar en el campo

VALENCIA

El fútbol, y conviene recordarlo, está enfocado al césped y a lo que dentro de él ocurra. Así lo entiende Miroslav Djukic, cuyo principal objetivo son los tres puntos. Su camino solo lleva a la victoria. A los lados de la senda se ha ido encontrando con alguna jugosa distracción para el entorno. La solución ha sido la conversación tan clara como intensa y breve que mantuvo el entrenador con sus pupilos el miércoles. Por si había algún despistado la ha vuelto a repetir en sala de prensa. Djukic quiere leones que luchen en los entrenamientos y no mascotas que lloren en sala de prensa

Jeremy Mathieu fue a hablar probablemente el día menos indicado. El entrenador serbio tenía pensado introducirle en el once titular para el partido contra el Espanyol. Evidentemente, y mientras Amadeo Salvo sigue buscando la cláusula del contrato del francés donde indique que tiene que jugar de central, Mathieu se colocará como lateral izquierdo para frenar las entradas al segundo palo de Stuani (1,83m) y para reforzar al equipo en el juego aéreo, una de las facetas más débiles que mostró el equipo en el estreno ante el Málaga. Casualmente la estrategia ofensiva es una de las armas del bronco, ordenado y rápido equipo de Javier Aguirre.

Pese a la victoria del pasado sábado, es notoria la intención de Djukic de cambiar algunos aspectos. Las excesivas conducciones, la falta de juego por banda y por tanto de profundidad y la necesidad de acabar las jugadas son las asignaturas pendientes que el equipo ha trabajado en Paterna. Los ejercicios a dos toques han predominado en las sesiones preparatorias. Uno de los que más deberá controlar este aspecto es Ever Banega, especialmente individualista ante el Málaga y de cuya actuación dependerá gran parte del caudal ofensivo blanquinegro.

Para paliar la falta de profundidad y de pegada el Valencia presentará nuevas bandas en Barcelona. Jonas, con su calidad y gol, y Feghouli, con su descaro y recorrido en banda, entran por Viera y por Fede, que ni siquiera forma parte de la convocatoria. El canterano prueba ya los sinsabores del fútbol de élite, donde en una semana se pasa del cielo al suelo.

Por su parte, el equipo de Javier Aguirre llega espoleado por su remontada en Vigo, que a punto estuvo de darle la victoria. El empate dejó como protagonistas a Víctor Sánchez y a Thievy, que podría entrar en el once, ya sea por banda o en punta desplazando a Sergio García. El Espanyol presentará un equipo marcado por la intensidad y las segundas jugadas.

Para frenar estos ataques Javi Fuego seguirá siendo ese compañero que te cubre el puesto sin decirle nada al jefe. El experto en coberturas defensivas se ha ganado un hueco en los esquemas del cuerpo técnico contra todo pronóstico y lo agradeció con un gran partido en Mestalla. Míchel tratará de ganar protagonismo y ser una alternativa cuando Banega esté marcado. El de Burjassot sabe que la hora de Parejo no está lejos y ni siquiera esperaba ser titular en Cornellá, por lo que su motivación y ganas de agradar serán grandes.

Arriba, Postiga se encuentra ante un partido importante para su devenir a corto plazo. Un tanto le haría ganar confianza y puntos de cara a la llegada de Pabón. De lo contrario, la ansiedad espera a la vuelta de la esquina. El recuerdo de la temporada pasada, con un frenético partido en el que el Valencia parecía muerto y remontó para acabar empatando en el último minuto, es el precedente. El objetivo de este nuevo Valencia es mejorar en lo táctico y demostrar la actitud que pide Djukic. La suma de estos dos factores acercará al Valencia a su primera victoria fuera de casa.