El Gobierno Vasco asume que deberá congelar el salario de sus funcionarios

El portavoz del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka, ha reconocido hoy que ve "francamente complicado" que el Ejecutivo autonómico pueda apartarse de la obligación de aplicar la congelación salarial a los funcionarios, establecida por el Gobierno central.

Tras el Consejo de Gobierno, Erkoreka ha explicado que hasta la fecha, Euskadi no ha adoptado un acuerdo concreto sobre esta cuestión aunque sí que se ha analizado el tema en la reunión de hoy del Ejecutivo.

No obstante, ha reconocido que no hay mucho margen para sortear esta nueva congelación salarial.

Así, se ha referido a la amplia jurisprudencia del Tribunal Constitucional que existe desde la etapa de Felipe González como presidente, en los 90, referida al ámbito de la función pública, y ha advertido de que el expresidente socialista invocó dos títulos competenciales "para atar en estrecho las retribuciones de los empleados públicos de las comunidades autónomas".

Uno es el régimen jurídico de las administraciones públicas y otro el de la ordenación general de la economía, ha explicado, ya que entonces se argumentó que "las retribuciones de los funcionarios eran muy importantes a efectos de controlar el déficit público".

Por tanto, "hay escaso margen para que ninguna administración pública, ninguna, ni las autonómicas ni las municipales, pueda apartarse de esta congelación salarial establecida por el Gobierno como norma básica en los presupuestos invocando razones legales", ha advertido.

A preguntas de los periodistas, ha admitido que ve "francamente complicado" que Euskadi pueda evadir esta obligación

En cuanto a los presupuestos del Gobierno para 2014, ha dicho que el Ejecutivo autonómico no comparte ni entiende la reducción del compromiso inversor, que ha calificado de "llamativa", y en el caso de la "Y" ferroviaria vasca, ha pedido al Gobierno de Mariano Rajoy que "si no va a hacer que deje hacer".

En este sentido, ha explicado que el Gobierno Vasco se ha ofrecido a adelantar las cantidades que le corresponde al Ejecutivo central para que la ejecución de las obras no se retrase pero ha lamentado que todavía no han recibido una respuesta clara ni favorable.

"No estamos hablando de convertir al Gobierno Vasco en un banco que financie obras pero sí de hacer más fácil una obra en la que el Gobierno central se está mostrando un poco remolón", ha subrayado.

Así, ha recordado que el desarrollo de estas obras preocupa al Ejecutivo de Iñigo Urkullu porque es una obra "estratégica".

Preguntado sobre el Cupo que el Estado ha presupuestado para 2014, ha reiterado que se trata de una estimación "unilateral" del Gobierno central, que está "sin contrastar" con el Gobierno Vasco y que carece de soporte legal, ya que la Ley Quinquenal 2012-2016 en la que se fija la metodología para su cálculo está sin aprobar.

También ha advertido de que no se aprobó la Ley Quinquenal anterior, lo que ha provocado que las dos Administraciones mantengan diferencias sobre el cálculo del Cupo vasco desde hace años que todavía no han solventado, y que ascienden ya a unos 900 millones de euros.