Mercedes Cantalapiedra acusa a una asociación de comerciantes de dar "puñaladas por la espalda"
La concejala de Cultura y Comercio, Mercedes Cantalapiedra, protagoniza una rueda de prensa cargada de ataques y reproches a los sindicatos, IU y, sobre todo, a la patronal Avadeco
Las desavenencias entre el Ayuntamiento de Valladolid y las asociaciones de comerciantes salieron a relucir con toda su crudeza en la comparecencia informativa sobre una iniciativa para promocionar la obra de 43 autores de la Unión Artística Vallisoletana en 32 establecimientos de la ciudad
La propia "escenografía" del acto informativo evidenciaba el abismo entre el equipo de gobierno de Javier León de la Riva y la agrupación de comercio, Avadeco. En la mesa de la rueda de prensa estaba Mercedes Cantalapiedra, el presidente de la Unión Artística Vallisoletana, Miguel Angel Soria y el presidente de Fecosva, Javier Labarga. El representante de Avadeco, Luís del Hoyo, fue vetado. Según la concejala porque no estaba al nivel de los tres interlocutores, ya que no era el presidente. Curiosamente, en la nota de prensa oficial difundida por el Ayuntamiento sí figuraba el nombre de Luís del Hoyo en la mesa presidencial.
Sin embargo, Luís del Hoyo sí se encontraba en uno de los bancos del salón de recepciones durante la presentación de la actividad comercial que estará en marcha en la ciudad hasta el 1 de noviembre.
El distanciamiento entre los empresarios y el Ayuntamiento de Valladolid salió a relucir en las primeras preguntas. Mercedes Cantalapiedra reprochó a Avadeco la falta de apoyo a los proyectos, incluso en el mercado del VAl. Además, criticó a los sindicatos y a Izquierda Unida.
Después de la rueda de prensa, Luís del Hoyo retieró que su asociación sólo tiene un interés: la defensa del pequeño comercio de Valladolid. Asimismo, se desmarcó de las descalificaciones que dos días antes había lanzado el responsable de CCOO, Luís Sáez, quien calificó a Cantalapiedra como "incompetente". El presidente de Fecosva, Javier Labarga, añadió que el manifiesto difundido por nueve colectivos del comercio tradicional no estaba completamente consensuado.
