Viajamos al nacimiento del río Tuéjar, en la comarca valenciana de los Serranos

En septiembre, el Consell lo declaró paraje natural municipal. Con la declaración del Paraje "Nacimiento del Río Tuéjar", la Comunitat cuenta con 68 parajes naturales municipales, que suman un total de 28.709 hectáreas protegidas. Hoy es nuestro destino imprescindible de la semana.

Antonio Martín propone una escapada de interior, a los Serranos, comarca valenciana de potentes paisajes. El paraje "Nacimiento del rio Tuéjar" está en un profundo valle labrado por el río que le da nombre, en las estribaciones del macizo de Javalambre, en uno de los territorios más agrestes, bellos y mejor conservados de la provincia de Valencia, surcado por un río de cristalinas aguas.

El paraje concentra variedad de ecosistemas: en las inmediaciones de la rambla del río se encuentra un bosque de ribera bien desarrollado con ejemplares de chopos, sauces y fresnos, aunque la masa forestal de pino carrasco es la que predomina en las laderas del valle, en el que también aparecen ejemplares de carrasca y madroño. Entre la fauna existen numerosas especies protegidas, como el águila perdicera, el alimoche o el búho real. También habitan especies cinegéticas como el jabalí, el ciervo, la perdiz o el conejo y sus depredadores, destacando el gato montés y la gineta. En el río se ha detectado la posible presencia de nutria y la trucha arcoiris.

Por su diversidad de hábitats y especies el enclave se ha incluido en la Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) denominada Alto Turia y Sierra del Negrete, espacio protegido que pasará a integrar la red europea de lugares protegidos denominada Red Natura 2000, como la declaración, dentro de sus límites, de la microrreserva de flora denominada Riberas del Río Tuéjar.

A lo largo del paraje existen también numerosos elementos culturales de gran relevancia, como el Bien de Interés Cultural del acueducto de la Peña Cortada, el azud, el antiguo nevero de La Lacaba o los yacimientos arqueológicos, entre los que destacan los corrales de Silla por sus pinturas rupestres.

En el pequeño municipio de Tuéjar se puede dar un agradable paseo por la villa, recorriendo las empinadas y tortuosas calles de la parte alta y, desde los terrenos donde estuvo asentado el castillo, disfrutar con una magnífica panorámica de la pequeña población rodeada de su fértil huerta. Destaca la iglesia parroquial de Nuestra Señora de los Ángeles; el Portal de los Santos, de marcado sabor medieval; pinturas rupestres de los Corrales de Silla, el Museo del Libro Manuel Aguilar, o los emplazamientos íbero-romanos como el del Castellar y el castillo de Zagra.

La gastronomía tradicional de la zona es propia de una zona de interior montañosa. Destaca la presencia de varios platos cuya base es la harina y sus derivados como son el gazpacho, las gachas y las migas. También están representados los guisos como el cocido, la olla de pueblo, y el pucherico espeso. Además es tradicional la elaboración de embutidos diversos y su conservación junto a otros derivados del cerdo en aceite, en la orza o jarra. Estos platos se completan con una variada repostería que incluye los mantecados, los rollos de aguardiente, la torta de almendras... En la zona se produce vinos tintos también conocidos vinos blancos de Alto Turia. (D. O. Valencia)

TURISMO CULTURAL

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