Bizkaia logró 1,9 millones al revisar las declaraciones de patrimonio en 2011
De esa cantidad, 1,3 millones de euros procedieron de contribuyentes que inicialmente no presentaron la declaración a la que estaban obligados
La Hacienda Foral de Bizkaia consiguió unos ingresos de 1,9 millones de euros al revisar las declaraciones del impuesto sobre el patrimonio correspondientes al ejercicio de 2011.
De esa cantidad, 1,3 millones de euros procedieron de contribuyentes que inicialmente no presentaron la declaración a la que estaban obligados y que fueron requeridos para ello por la Diputación vizcaína.
Estos datos han sido facilitados por la Diputación a EH Bildu, que pidió información en las Juntas Generales de Bizkaia en relación con el fraude detectado en el impuesto sobre el patrimonio.
Este tributo, al que están obligados los contribuyentes con un patrimonio superior a los dos millones de euros, fue suprimido en Bizkaia a partir del ejercicio de 2008.
Posteriormente, se recuperó de forma temporal en 2011 y 2012 y de forma definitiva a partir del presente ejercicio.
En su respuesta a EH Bildu, la Diputación precisa que "todas" las declaraciones del impuesto sobre el patrimonio se revisan por la Hacienda foral mediante "procedimientos informáticos de carácter masivo basados en un sistema de marcas que permiten seleccionar aquellas declaraciones que revisten mayores indicios de un posible fraude".
Aunque la coalición abertzale había pedido datos de 2011 y 2012, el Gobierno foral aporta cifras del primero de esos años debido a que el periodo de presentación de las declaraciones correspondientes a 2012 concluyó el 30 de junio de 2013 y aún están en revisión, por lo que no se dispone todavía de datos concretos.
Hacienda precisa que en 2011, se presentaron en Bizkaia 5.553 declaraciones del impuesto sobre patrimonio, de las que 3.720 se seleccionaron para su revisión.
Como consecuencia de ello, se practicaron 389 propuestas y liquidaciones a favor del fisco por importe de 567.000 euros.
Además, la Diputación vizcaína envió 295 requerimientos a contribuyentes que no presentaron la declaración pese a estar obligados a ello, lo que generó la presentación de 241 autoliquidaciones del impuesto.
Ello supuso un ingreso total de 1,33 millones de euros que, sumados a los 567.000 euros citados, completan la cifra de los 1,9 millones conseguidos en la revisión de las declaraciones de patrimonio de 2011.




