La Real Sociedad empata en el Sadar nuevamente por su falta de ambición

Una Real Sociedad, que desapareció a la media hora de juego y calcó sus últimas actuaciones. Los realistas dejan pasar una buena oportunidad y siguen sextos en la tabla

La Real visitaba el Sadar sabiendo que el Athletic y el Sevilla habían perdido sus partidos y tenían la oportunidad de alejarse de los andaluces y situarse a cuatro puntos de los vizcainos.

Pero para ello había que ganar, algo que no se produjo, en un partido donde los de Jagoba Arrasate, tras un esperanzador inicio, con el gol incluido de Chory Castro, tras jugada personal de Carlos Vela, regresó a ser el equipo de los últimos partidos, falto de ambición, dando alas al rival y así Oriol Riera, todo un martirio para la defensa realista, comenzaba a dar señales de que en cualquier momento podía darle un susto a los donostiarras.

Así en el minuto 24, cabeceaba un centro pegado al palo izquierdo de la meta del chileno Claudio Bravo.

Respondía Imanol Agirretxe que de cabeceaba un centro de Zurutuza para que Andrés Fernández enviara a corner.

Osasuna, crecido, ante una Real que comenzaba a desaparecer y que sufría mucho a balón parado, volvía a pasar apuros ante un cabezazo de Oriol Riera, solo ante Bravo que se va fuera, era el minuto veintisiete.

De ahí hasta el final de la primera mitad, alternativas en el juego, pero sin ocasiones y con una Real que tras dominar los primeros 30 minutos, pegó un bajón que no presagiaba nada bueno para la segunda parte.

Una segunda mitad que comenzó con una oportunidad de David Zurutuza, que remata, con la izquierda, un largo saque de banda de Chory Castro.

Incluso, un despeje de Iñigo Martínez, desde el centro del campo, se envenenó y con Andrés Fernández adelantado, escupió el larguero del guardameta navarro.

Jagoba Arrasate hizo dos cambios, Griezmann entró por Chory y Canales por Zurutuza.

Lejos de mejorar, el equipo siguió en picado hacía abajo en su rendimiento, lo del francés comienza a ser más que preocupante y el cántabro tampoco cogió su sitio en el campo.

Osasuna, sabedor que su rival estaba en otro sitio, apretó en el juego directo, ante una Real muy mal en defensa, y en el minuto nueve, Roberto Torres, gran partido el suyo, tira fuera solo ante Bravo.

Fatídico iba a ser el minuto trece. Roberto Torres saca por la derecha una falta, que Oriol Riera, cabecea a placer en la frontal del área chica ante la pasividad de los defensores realistas, para firmar el empate.

De hay hasta el final, con la Real fuera del partido, Osasuna, con la permisividad de un equipo, el donostiarra desdibujado, aprieta.

Bravo, minuto 24, tiene que sacar con los pies un disparo del Gato Silva.

Osasuna, parece conformarse con un punto y la Real no porfía por la victoria, pero en los minutos 48 y 49, Osasuna las tienen en las botas de Lobato y en un cabezazo final que Bravo, el mejor de los blanquiazules salva para que el colegiado andaluz, Fernández Borbalán, pite el final de un partido donde la Real ha dejado pasar una gran oportunidad, por falta de ambición, de un equipo al que parece que el final del campeonato se le está haciendo eterno.

Sumar es importante, pero el empate del Sadar sabe a muy poco y aleja las posibilidades de repetir puesto Champions.