El hombre que defiende la Catedral Nueva a palos

No es la primera vez y ayer ocurrió de nuevo. A la hora del recreo en los colegios de los alrededores, unos veinte adolescentes ocupaban las escalinatas de acceso de la entrada a la Catedral Nueva por la calle Prado. De repente, un hombre salió del interior del templo portando un gran palo para expulsar a los chavales.

La Cadena Ser pudo ver in situ cómo en el tumulto que se montó cuando los adolescentes escapaban de las escaleras, una mujer que paseaba por la calle cayó al suelo. Afortunadamente, no resultó herida.

"Suele salir con escobas, palos, un spray y alguna vez nos ha pegado patadas", relataban a la Ser dos adolescentes poco después del incidente. "No le gusta que estén ahí los skaters, pero lo paga con todos; alguna vez incluso ha amenazado con llamar a la policía pero nunca lo ha hecho".

Una vez que el hombre guardó el palo en el interior, la Ser pudo charlar con él. Reconoció estar a cargo de la Catedral Nueva aunque no quiso facilitar su identidad.

"-Es la entrada de la Catedral y vienen a ensuciar todo los chavales, ya sabes lo que son.

-¿Y ha salido usted para ver si los podía echar?

- Yo estoy a cargo de esto y tengo que respetar esto. ¿Qué quería saber usted, pues?

- Eso, pero le he visto salir con un palo y...

- Pero es que no se puede jugar aquí, esto es para que venga el público y vea la catedral y se largue, no para estar tirando porquería por aquí

- ¿Y usted quién es?

- Yo no soy nadie".

Tras la conversación, el hombre comenzaba a arrancar una pancarta reivindicativa colgada de la verja de la Catedral Nueva.