La final de Champions enfrenta de nuevo a Delegación y Comunidad | 14-05-2014

El Ejecutivo madrileño ha vuelto a vivir un otro desencuentro con la Delegación del Gobierno en Madrid, esta vez a cuenta de la instalación de una pantalla gigante para que los aficionados puedan ver en la Puerta del Sol la gran final europea de Lisboa, entre el Real Madrid y el Atlético. El Gobierno regional se dirigió a la delegada y Cristina Cifuentes les ha remitido a la Junta Electoral para autorizar este evento. La Comunidad tampoco ha solicitado permiso al Ayuntamiento.

Oficialmente, en la Puerta del Sol no creen que la delegada del Gobierno esté poniendo palos en las ruedas, pero sí echando balones fuera. "Querida Cristina", empezaba diciendo el consejero de Presidencia, Salvador Victoria, en su carta; "Querido Salva", respondía en el mismo tono Cifuentes.

Cortesía institucional al margen, el consejero echaba mano este miércoles de la ironía para criticar la actitud de la delegada del Gobierno. He preguntado 'qué hora tienes' y me han contestado 'estás muy guapo'", ha ironizado Victoria. "Siempre había pensado que la Delegación es la competente en materia de seguridad ciudadana, pero parece ser que no", añadía.

En su carta Cifuentes responde que tratándose el 24 de mayo de una jornada de reflexión previa a las elecciones europeas, la Comunidad debería dirigirse a la Junta Electoral. Previamente, el presidente madrileño, Ignacio González, anunciaba que consultarán con la Junta Electoral y con el Ayuntamiento, aunque el portavoz del Ejecutivo regional se ha preguntado con ironía si todas las pantallas que se instalarán en Madrid el día de la Champions requerirán del permiso de la Junta Electoral, tal y como dispone la delegada del Gobierno.

El equipo de Botella también "juega"

El artículo 17 de la Ley de Espectáculos, de la propia Comunidad, no deja lugar a dudas: "La utilización de la vía pública para la realización de espectáculos y actividades recreativas requerirá la previa obtención de la autorización municipal correspondiente".

La ley precisa además que, para la obtención del permiso, los organizadores están obligados a contratar un seguro de responsabilidad civil por daños en la cuantía determinada reglamentariamente.

Ni una cosa ni otra. Hasta hace unos minutos, la Comunidad de Madrid no había solicitado el oportuno permiso ante la Junta Municipal de Centro, encargada de autorizar o denegar la instalación de la pantalla gigante.

Hace una semana, al término de la Junta de Gobierno, la propia alcaldesa ya advertía sobre las limitaciones legales que existen para ese tipo de actos al coincidir con la campaña electoral.

La Ordenanza Reguladora de la Publicidad Exterior sí permite, en cambio, la instalación de las dos camisetas gigantes, que desde hoy "presiden" la Real Casa de Correos. El Ayuntamiento considera que es un apoyo institucional ante un evento que es de interés para la ciudad.

El propio Consistorio ha colgado dos escudos gigantes del Real Madrid y del Atlético en la fachada principal del Palacio de Cibeles. En este caso no hay publicidad de los patrocinadores de ambos equipos, como ocurre en Sol, sino únicamente la palabra ¡Madrid!